El motor turístico de Trujillo requiere un empujón

El estado cuenta con numerosos atractivos turísticos y la hospitalidad de su gente, solo se requiere la integración de los distintos actores para impulsar la industria como una actividad económica capaz de desarrollar la región.

Varios de los parajes trujillanos son propicios para el disfrute de propios y visitantes, sin embargo ese potencial pareciera no aprovecharse y es que a pesar que el turismo es una actividad económica capaz de generar numerosos puestos de trabajo y cuantiosos ingresos, todavía no está consolidado en la región.

Ahora bien, hay intenciones de fortalecer el turismo, justamente de una manera organizada desde la Cámara de Comercio de Trujillo a través de su Dirección de Turismo, encabezada por el profesor Alexander Valero, quien también busca conformar la Cámara de Turismo adscrita a Fedecámaras-Trujillo.

Un trabajo en conjunto

Valero está consciente que falta mucho por recorrer para desarrollar el turismo y uno de sus principales obstáculos tiene que ver con la metodología implementada, a su juicio, quienes integran el sector en lugar de trabajar en conjunto lo hacen de forma independiente sin engranar con los demás prestadores de servicios, por tal razón es enfático al expresar: “Es necesario trabajar articuladamente y establecer alianzas en pro del turismo”.

En tal sentido, recomienda a los encargados de hoteles y posadas ofrecer promociones enlazadas con restaurantes, bares o cafés, así como con paseos o rutas turísticas y viceversa, de este modo, el turista encuentra distintas opciones para elegir la que más se adapte a sus preferencias y presupuesto.

También considera que en ese proceder, deben participar tanto el gobierno como el sector privado en un mismo campo de acción, pues nada se hace si las oficinas públicas proceden por un lado y los prestadores de servicios por otro, “Se necesita unificar criterios y fijar una línea enfocada en promover la oferta turística trujillana”, recalca Valero.

Bajo esa óptica, deja claro que algunos organismos gubernamentales inherentes a turismo se han sumado a trabajar con las empresas, pero Valero insiste en que se requieren mayores alianzas, lo que permitiría crear y ejecutar programas turísticos de tipo mixto (público- privado) con los cuales se atraería a más turistas, también se pudiera conocer con precisión la capacidad que tiene el estado para atender turistas y hasta levantar un registro de la cantidad de viajeros recibidos durante una determinada temporada.

De momento, obtener este tipo de datos no es posible a pesar que sería de gran utilidad para utilizar como base de datos y proyectar el panorama turístico trujillano en las venideras temporadas de asueto.

La Puerta epicentro del turismo regional

Con el fin de contrarrestar todas esas debilidades y ofrecer una mejor oferta al viajero, la cámara de turismo saca a relucir un plan que tiene como punto focal La Puerta, la cual es una de las principales atracciones turísticas del estado Trujillo, en el lugar, los representantes de hoteles, posadas, restaurantes y otros prestadores de servicio decidieron unirse bajo la consigna “Vive La Puerta” y en un mismo bloque ofrecen una propuesta de atención al visitante en cuanto al alojamiento, gastronomía y entretenimiento con opciones para las diferentes edades y gustos.

Esa alianza genera resultados positivos, tanto individuales como colectivos, e incluso a través de la organización pudieron determinar que tienen más de dos mil plaza-camas al servicio de los temporadistas en la parroquia La Puerta y para esta Semana Santa prevén cuantificar el flujo de visitantes, lo cual serviría como referencia para otras épocas de asueto.

Ya La Puerta dio marcha al plan y según Valero también se quiere replicar en Escuque, Isnotú, Trujillo capital y Boconó, donde ya hay algunos adelantos.

Necesario el apoyo gubernamental

Todos estos planes antes mencionados apuntan a generar un impacto positivo, sin embargo pudieran verse empañados con otros factores que ya escapan de la maquinaria turística, tal es el caso del combustible y es que el territorio trujillano constantemente padece por el suministro de gasolina, justo previo a la Semana Santa se atraviesa por una escasez del carburante en la región, lo que sin duda representa un grave problema para el viajero, quien se ve limitado a la hora de transportarse, esto sin nombrar el mal estado en que se encuentran las vialidades, las cuales empeoraron en los últimos meses, producto de las fuertes lluvias que acaecieron en la entidad.

No obstante, la vía terrestre es la única manera que se tiene de ingresar al estado, pues aún no reactivan los vuelos comerciales en el Aeropuerto Antonio Nicolás Briceño en el municipio San Rafael de Carvajal, una promesa que muchos esperan sea una realidad para facilitar las conexiones entre Trujillo y el centro del país.

Son varios inconvenientes que merecen ser corregidos si se piensa en el turismo como eje de desarrollo regional, una tarea que a todos compete.

 


Por: Hebert Carrizo

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

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