Bogotá, 15 mar (EFE).- El Gobierno colombiano anunció este miércoles que denunciará por estafa a directivos de la aerolínea Viva Air que el pasado 27 de febrero suspendió sus operaciones por una crisis financiera, dejando a miles de pasajeros en tierra y sin alternativas de vuelo.
El ministro de Transporte, Guillermo Reyes, dijo en Colombia Hoy Radio, programa radial del Gobierno, que presentará la denuncia en la Fiscalía General de la Nación contra los directivos de la aerolínea de bajo coste porque vendieron pasajes hasta última hora, a sabiendas de que la compañía iba a dejar de operar.
«Estamos poniendo la cara como Gobierno del cambio por nuestros pasajeros, por nuestros usuarios, por nuestras agencias de viajes, por nuestra defensa del transporte aéreo», aseguró Reyes.
Viva Air, creada en 2009, afronta una crisis financiera grave y decidió suspender sus vuelos nacionales e internacionales tras el rechazo de las autoridades a su petición de integración con Avianca, provocando una crisis aérea que se extendió a otros países, especialmente Perú.
Esa determinación dejó a miles de personas en los aeropuertos y aunque muchos de ellos pudieron volar en los días siguientes gracias a arreglos con otras aerolíneas, numerosos viajeros denunciaron que incluso minutos antes de suspender las operaciones, Viva seguía vendiendo billetes en su página web.
Según medios locales, hay aproximadamente cerca de un millón de billetes vendidos de Viva, tanto nacionales como internacionales, cuyos compradores exigen soluciones por parte de la aerolínea.
El ministro se refirió también a la situación laboral de los trabajadores Viva Air y explicó que la compañía cuenta con los recursos para hacer la liquidación de todos los empleados y que otras aerolíneas han contratado a algunos de ellos, proceso acompañado por el Ministerio de Trabajo.
El pasado 1 de marzo, tres días después del cese de operaciones de la aerolínea, la Superintendencia de Transporte de Colombia abrió una investigación administrativa y formuló cargos contra Viva Air por el «presunto incumplimiento» de la ley «debido a la suspensión súbita de sus operaciones (…) afectando a los usuarios que ya contaban con reservas emitidas y confirmadas».
Reyes se refirió también a una posible suspensión de operaciones de Ultra Air, otra aerolínea de bajo costo colombiana, desmentido ayer por la propia compañía, y aseguró que el Gobierno vigila su funcionamiento.
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«Nosotros, con la Superintendencia de Transporte, estamos obteniendo toda la información sobre el estado de balances de pasivos y activos» para advertir, en caso de que sea necesario, a los pasajeros, manifestó.
