El deporte que se añora

El deporte trujillano pareciera que ha vivido sus mejores tiempos, tiempos de educación, enseñanza y formación, tiempos que construyó lo poco o mucho que se tiene en la actualidad, incluyendo la lucha de sus dirigentes.

Mario Urdaneta Araujo junto al presidente del IND en 1953, Frank Risquez.

Frank Graterol

@frangraestudiodeportivo

Quién lo diría. A escasos 75 años de que el deporte naciera en Trujillo, o al menos es lo que conocemos, la añoranza de aquellos tiempos es una constante de la mejor manera, los grandes maestros que estuvieron al frente de las actividades deportivas en el estado Trujillo con sus gestiones, educaron, enseñaron y demostraron que el deporte era un modo de vida a pesar de las negativas de padres y madres que tildaron de “vago” al que lo practicara.

 

Desde Mario Urdaneta Araujo

Desde aquel Comité de Deportes y Atletismo del Distrito Valera por la década de los 40, el primer gran maestro del deporte trujillano fue el Odontólogo Mario Urdaneta Araujo. Desconociendo la generación fundadora de ese Comité que pudo haber sido a principios del siglo XX. Mario fue propulsor del béisbol, jugó fútbol y voleibol, un atleta completo y un amante a las organizaciones deportivas, lo que lo hizo dirigente muy joven, tanto así de haber sido reconocido con su nombre el Estadio Olímpico de Valera, el cual reinauguró en época perezjimenista el 05 de diciembre de 1957.

Los inicios del Instituto Nacional del Deporte en Venezuela le dio la oportunidad para que a los compendios de la década de los 50 se convirtiera virtualmente en el primer director de deportes del estado Trujillo. Una gerencia ad honorem y que la virtud era tener gran credibilidad para que amigos y empresarios invirtieran con sus colaboraciones y así fomentar el deporte. Esos fueron los inicios, así se construyeron los principales escenarios deportivos que hoy conocemos y se empezó a sembrar gran parte de lo que hoy tenemos y que se está perdiendo en el maravilloso mundo del deporte en Trujillo.

La actividad deportiva fue educación y se convirtió en uno de los nuevos valores para la formación de un niño o una niña, no era fácil, los padres no creían mucho en ello pero la dirigencia les fue enseñando, les fue mostrando y fueron entendiendo.

 

Mosqueteros del deporte

Profesor Luis Loreto Lira, su lucha dio muchos frutos.

Después vinieron épocas distintas pero con matices iguales, educar y formar el deporte trujillano. Joaquín Padilla, Profesor Luis Loreto Lira y Régulo “Bachiller” Godoy, dictaron cátedra. Junto a ellos Joaquín Oquendo, quien se convirtió en el primer director de deportes oficialmente, ya en una nómina; y Darío Gamboa quien fue el último de esa época romántica del deporte en el estado Trujillo a mediados de la década de los 80, una época que nunca volverá y que a pesar de la evolución en todos los sentidos, la llegada de grandes presupuestos, o de un presupuesto fijo, hoy en día el deporte es excluyente, la prioridad no tiene aún una definición sustancial pero lo que sí está claro es que aquella frase de Joaquín padilla “El Estado está en la obligación de atender al atleta en todos sus aspectos”, está centrada en decisiones discutibles y sin justificación.

 

El Joaquín visionario

Joaquín Padilla siempre fue un visionario, no tuvo apoyo económico para todo lo que planteó en su paso por el deporte trujillano. Fue un guerrero, mucho coraje y tesón, algo que lo llevaba en su ADN, así fue campeón nacional tres veces guiando a la selección del estado Trujillo de softbol. Siempre tuvo claro que “un atleta con problemas nunca podrá rendir”, le mostró a los gobernantes de ese entonces cuánto era el valor del deporte en un estado.

 

La lucha del Profesor Lira

Treinta años de lucha por el deporte trujillano, incluyendo diez años como director de deportes en la que no descansó y que lo llevó a grandes choques con los gobernantes de entonces, sus jefes, eso incluso lo llevó a retirarse del cargo, cansado de tanta migajas para el deporte del estado Trujillo. El padre de las 13 ediciones de los Juegos Atléticos Escolares, un evento que trascendió y dio sus frutos de cara al alto rendimiento. Se puede decir que fue uno de los que masificó sin ser el plan principal de un proyecto. Lira fue el propulsor de lo que hoy es la Ciudad Deportiva, el estadio de fútbol (José Alberto Pérez), con su pista de atletismo y el Velódromo fue una realidad. Su honestidad y respeto más su trabajo liderando la época a nivel gerencial permitió ello y mucho más como el gimnasio “Ricardo Salas”.  Por si fuera poco, el Profe, marcó un histórico momento en la historia del atletismo trujillano, bajo su mano, coronó la Era de Oro para que Trujillo mandará a nivel nacional con Peter Hoffman, Ramón Peña, Teresita Rosales. Betty Urdaneta, Alirio Ochoa, las hermanas Saroziek, Nepalí Moreno y pare de contar en una gran camada.

Por ello se honra el hoy Complejo deportivo con su nombre. Fueron años de lucha que dieron sus frutos, hoy se ha perdido ese espíritu de lucha en la dirigencia deportiva, todos comprometidos en una base personalista e interesada.

 

Cátedra del “Bachiller” Godoy

Régulo “Bachiller” Godoy dedicó su vida al deporte trujillano.

El testigo de Lira lo recibió Régulo José Godoy, mejor conocido como el “Bachiller” Godoy quien dictó cátedra en su época dirigencial. Hombre que terminó siendo un gran alumno de Oquendo, del propio Lira y de Don Darío Gamboa. Dedicó su vida al deporte, se pudiera decir. Godoy fue de los que creyó en el equipo de trabajo, en delegar y ahí se centró su éxito. Un equipo de trabajo de hombres y mujeres de los que debemos resaltar a Darío Gamboa y a Rafael José Daboin, RJ, el último gran dirigente para los entendidos.

“El Bachi” tuvo su lugar en la Junta directiva del entonces Proletarios, un par de décadas trabajando ad honorem por el deporte trujillano y unos más en su gestión como director de deporte con la gobernadora Dora Maldonado. También estuvo involucrado en los Juegos Atléticos Escolares, fue presidente de la Asociación Trujillana de Béisbol y dirigió unos cuantos eventos y campeonatos de carácter nacional. Fue los ojos de Trujillo en el deporte para todo el país, incluso su casa fue sede del deporte trujillano porque no había sede. Una mística de trabajo increíble, no había horarios, se aprovechaba al máximo sábados y domingos, definitivamente el “Bachiller” Godoy dictó cátedra en el deporte trujillano.

 

Lo mejor de lo mejor hasta hoy

En tiempos de tecnología, de una Venezuela más rica que nunca pero con la etiqueta siempre de la falta de recursos hoy en día podemos afirmar que han sido los mejores años del deporte trujillano, sin dinero, pero esos dirigentes lo buscaban de otra manera, luchaban con sus patrones, con el IND en pro del deporte trujillano. Algo inimaginable en estos tiempos. Darío Gamboa estuvo encargado hasta 1984 y cerraron los tiempos de la mal llamada IV República Gilberto Miranda, Santos Montilla, Víctor Ruiz. Oscar Hernández y Rafael José Daboín.

Con recursos es muy fácil hacer gestión aunque muchos lo tuvieron y no fueron grandes dirigentes, ni a nivel regional, ni a nivel de Juegos Nacionales, que esto es otra historia. Otros tuvieron muy pocos y mostraron sus cualidades de hacer con lo poco, mucho. Otros pasaron sin pena ni gloria, a otros no los dejaron trabajar y a otros, luego de rescatar muchas cosas, le dejaron de apoyar. De todo un poquito en la Villa del Señor y en el mundo del deporte trujillano, pero hoy en día, ese aprendizaje, esas enseñanzas, esa educación de todos estos dirigentes deberían ser ejemplo para el deporte trujillano. Tiempos que no volverán para muchos. A veces no es así.

 


La camada del siglo XXI

Vientos de revolución llegaron para el comienzo de este siglo. Rigoberto Ocanto y María Avendaño por pocos meses en el ya Instituto Trujillano del Deporte (ITD), terminando con el cargo Alejandro Sánchez Martorelli, quien logra una conversión a Coordinación Trujillana del Deporte (CTD) y después Servicio Autónomo Trujillano del Deporte (Satrud), consiguió el mejor presupuesto que haya tenido en su historia el instituto que rige el deporte en Trujillo, gestión hasta el 2.008 donde desfilaron también Giovanni Sardi y Marlene Briceño. Exhar Balza asumió, quedando con las manos vacías, en cuanto al presupuesto, la inflación del momento nunca se ajustó a la realidad deportiva trujillana. De ahí en adelante nació la gran cruz que han tenido que llevar las asociaciones del estado, Rafael Torrealba y Heriberto “Pescao”Araujo fueron responsables entre el 2008 y 2012, hicieron magia con lo poco que tuvieron a la mano. Deportes élites arriba. Los turnos le llegaron a Hernán Campos hasta Juan Linares que logra entre el 2013 y 2014 hacer historia. Un equipo encabezado por Josué Carrillo brilla con la creación de la hoy Ley del Deporte, convierten a Trujillo en campeón a nivel de los deportes élites como el Trujillanos BBC, Trujillanos WPC, se juega la Copa Merconorte con Trujillanos Futsal, recupera la Vuelta a Trujillo con premios en vehículos y motos, además de los premios al Atleta del Año (En la Mesa de Esnujaque), y termina con un búnker en plena ciudad de Caracas para los últimos Juegos Nacionales que se han realizado en el país. Fue relevado por Randy Chirinos quien le da la bienvenida al Indet y a la promulgación oficial de la Ley antes aprobada. Luego llegaría el expelotero profesional Medardo Fernández y ahora el atleta que más ha cosechado a nivel de medallas en el ciclo olímpico para Trujillo, Jesús Abraham González Barrios. La historia simplemente los juzga con cada turno que han tenido en la difícil tarea de llevar las riendas del deporte. Estamos lejos de lo mejores momentos del deporte trujillano.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

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