Madrid, 6 ago (EFE).- En una de las Ligas más «low cost» de los últimos tiempos, el Barcelona, con incorporaciones de calado a bajo coste como las de Oriol Romeu, Iñigo Martínez e Ilkay Gündogan, defenderá el título frente a dos duros aspirantes: el Real Madrid, con un refuerzo de relumbrón llamado Bellingham, y el Atlético, que al final del curso pasado encontró una consistencia que intentará mantener para plantar cara a los dos grandes del fútbol español.
Este verano la inversión de los clubes de LaLiga ha sido escasa. La austeridad ha marcado el mercado y los equipos españoles son los que menos han gastado de los cinco grandes campeonatos de Europa (Premier League, Ligue 1, Bundesliga y Serie A).
De momento, a falta de algo menos de un mes para el cierre del mercado, los equipos de la Liga española suman cerca de 250 millones de euros en gastos (103 de ellos los ha invertido el Real Madrid en Bellingham), mientras que en Alemania, Francia e Italia la inversión ha sido el doble y en Inglaterra ha alcanzado la estratosférica cantidad de prácticamente 1.500 millones de euros.
Habrá que ver si esas diferencias afectan en las competiciones internacionales. Pero esa es otra historia, porque en el plano local la pelea por el título la centrarán tres clubes salvo que aparezca una sorpresa agradable que se una a la lista de aspirantes para terminar con el dominio del ‘Big Three’ que ya dura casi veinte años, desde que el Valencia de Rafa Benítez se proclamara campeón en el curso 2003/04.
EL BARCELONA, RIVAL A BATIR: MADRID Y ATLÉTICO, LOS ASPIRANTES
A priori, el Barcelona es el equipo a batir. Es el campeón y el resto son los aspirantes a quitarle la corona. El equipo de Xavi Hernández ha perdido a dos de sus pesos pesados en la última década (Jordi Alba y Sergio Busquets) y para compensar ha recuperado en el lateral izquierdo a Álex Balde, cedido la pasada temporada en Osasuna, y ha firmado a Oriol Romeu y a Ilkay Gündogan para reforzar el centro del campo. Además, Iñigo Martínez, también a coste cero, aportará experiencia en el centro de la defensa.
La más que posible pérdida de Ousmané Dembélé, probable fichaje del París Saint-Germain, podrá dar más espacio a jugadores como Ansu Fati, que aspira a volver al estado de gloria en el que vivió antes de su grave lesión. Junto a Pedri y Gavi, más la calidad de Frenkie de Jong y Raphinha, la experiencia de Gündogan y la solidez de Ronald Araujo, el Barcelona espera revalidar el título.
Uno de los aspirantes a arrebatárselo, el Real Madrid, iniciará el asalto a la corona que posee el Barcelona sin Karim Benzema por primera vez en catorce años. La marcha al fútbol saudí del jugador francés ha dejado huérfano el ataque madridista, que, pese a la llegada de Joselu, aún podría reforzarse con el eterno fichaje que nunca llega: Kylian Mbappé.
Mientras Florentino Pérez trabaja para firmar al astro francés, Jude Bellingham es la cara nueva de mayor relumbrón. El centrocampista inglés pondrá la guinda a una sala de máquinas mezcla de veteranos (Luka Modric y Toni Kroos) con jugadores más que emergentes (Eduardo Camavinga y Aurelien Tchouaméni).
Además, Fran García en el lateral izquierdo, el regreso del cedido Brahim Díaz y la apuesta de futuro de Arda Güler, marcan un proyecto continuista con Ancelotti al frente en la que podría ser la última temporada del técnico italiano con la selección brasileña en el horizonte. ‘Carletto’ querrá despedirse a lo grande.
Y el Atlético seguro que presentará batalla. Terminó la temporada pasada muy enchufado y se quedó a un paso de arrebatarle el subcampeonato al Real Madrid. En verano, mantiene su buena imagen en los amistosos que ha disputado con victorias de relumbrón como la que consiguió ante el Manchester City y más o menos mantiene el mismo bloque con el que espera asaltar la Liga.
Simeone se ha reforzado con Javi Galán, Çaglar Söyüncü, César Azpilicueta y con el uruguayo Santiago Mouriño. A ellos, se une el regreso de algún cedido como Samuel Lino. Todos pueden aportar cosas interesantes. En el aire queda el futuro de Joao Félix y de Álvaro Morata. El primero, tiene pie y medio fuera del club rojiblanco. El segundo, cuenta con mejor predicamento entre el cuerpo técnico y podría quedarse. Por lo general, el técnico argentino mantiene el bloque del curso pasado con Antoine Griezmann al frente como pieza clave.
POCA INVERSIÓN EN LA PELEA POR EUROPA
En la pelea por Europa, Real Sociedad, Villarreal, Betis, Osasuna, Athletic y Sevilla viven en un estado «depresivo» por la ausencia de refuerzos importantes. Sobre todo el Villarreal, que se ha convertido en un club vendedor y ha perdido a Nico Jackson (Chelsea), Pau Torres (Aston Villa), Samu Chukwueze (Milan) o Danjuma (cedido al Everton). Ha ingresado 110 millones de euros y ha gastado sólo 12 con caras nuevas como las de Santi Comesaña o Alexander Sorloth.
La Real deberá compaginar Liga con Champions y evitar sufrir como en la temporada 2003/04, cuando también jugó la competición europea y peleó por no perder la categoría. El equipo de Imanol Alguacil se ha quedado sin David Silva, obligado a retirarse por una lesión, y sin Sorloth, ahora en el Villarreal. Recupera a su fichaje estrella del curso pasado, Umar Sadiq, de baja todo un año y ahora de vuelta, e incorpora a André Silva y Hamari Traoré para intentar completar un buen curso en dos competiciones.
El Sevilla aspira a recuperar el pulso a la Liga después de coquetear con el descenso durante un tramo de la pasada edición. Se recuperó de la mano de José Luis Mendilibar, con quien ganó la Liga Europa, pero el rendimiento en el torneo de la regularidad fue mediocre. Con las bajas de Rony Lopes, José Ángel Carmona, Karim Rekik, Bryan Gil, Pape Gueye y Alex Telles más las llegadas de Djibril Sow, Loïc Badé, Adriá Pedrosa y Federico Gattoni, el club andaluz espera recuperar su grandeza.
En el Betis, que participará en la Liga Europa, inicia la era ‘post Joaquín’ tras la retirada definitiva de su capitán. Tampoco estará Sergio Canales, que hizo las maletas hacia el fútbol mexicano, pero incorpora a Isco Alarcón, Marc Roca, Marc Bartra, Chadi Riad y Álex Collado. Todos a coste cero, o cedidos o libres. Con ellos, el chileno Manuel Pellegrini intentará repetir su buena temporada.
Igual que Osasuna, que mantiene un bloque compacto en el que entrenador (Jagoba Arrasate) y jugadores suben cada año un peldaño. El pasado, Osasuna llegó a la final de Copa y se clasificó para la Liga Conferencia, competición que finalmente disputará tras el susto que se llevó desde la UEFA, que en un primer momento sancionó al club navarro con dejarle sin competición europea. En ella seguro que gozará de minutos Aimar Oroz, la estrella emergente de Osasuna que espera asentar su condición de jugador de futuro en su segundo año en la primera plantilla.
GIRONA, ASPIRANTE A DAR LA SORPRESA
En el bloque de aspirantes a dar la sorpresa se encuentra el Girona, que ha hecho un buen trabajo desde los despachos y ha incorporado a nombres sugerentes como los de Pablo Torre, Yan Couto, Daley Blind y Yangel Herrera. Con esos refuerzos, espera dar el salto de calidad que le faltó la temporada pasada en la que coqueteó con Europa.
El Athletic, con los únicos refuerzos de Iñigo Ruiz de Galarreta y de Javier Martón, por quienes no se ha gastado ni un euro, y sin jugadores importantes como Iñigo Martínez (se fue libre al Barcelona), intentará volver a una competición europea que no disputa desde hace un lustro. Vive atascado en la octava posición desde hace dos cursos. Roza la gloria, pero no la consigue y San Mamés la necesita.
El Celta iniciará proyecto con Rafa Benítez al frente. El técnico madrileño espera dar un salto de calidad en un equipo que ha sufrido demasiado en los últimos cursos y que está necesitado de una alegría. Iago Aspas, de nuevo, es su referente en el terreno de juego y llega Jonathan Bamba que cuajó una buena temporada en el Lille.
Igual que el Valencia, otro club deprimido por sus malos resultados en las últimas temporadas. Histórico venido a menos, apenas se ha reforzado con Cenk Özkacar y Pepelu y ha perdido a nombres como Ilaix Moriba, Nico González, Samuel Lino o Justin Kluivert, todos de regreso a sus clubes de origen tras cumplirse sus cesiones. Rubén Baraja tendrá mucho trabajo desde el banquillo.
EL OBJETIVO DE LA SALVACIÓN Y POR QUÉ NO ALGO MÁS
En el Getafe también necesitan evitar sustos tras dos campañas consecutivas salvándose de milagro. Con José Bordalás al frente desde el principio, espera reconducir su situación. El técnico alicantino ya no llega como un salvador, ahora quiere ser el impulsor de un club deprimido en la tabla y con pocas caras nuevas salvo las del «Choco» Lozano, Daniel Fuzato, José Ángel Carmona y Sergi Altimira.
A su vecino, el Rayo Vallecano le han ido mejor las cosas estos últimos años. Sin embargo, afrontará el curso con nuevo entrenador (Francisco Rodríguez) y sin Andoni Iraola, que exprimió con tino a una plantilla que el curso pasado llegó a soñar con Europa. Francisco recogerá el testigo e intentará mantener al Rayo con solvencia con la ausencia de jugadores importantes como Santi Comesaña, Fran García, Alejandro Catena o Sergio Camello.
El Mallorca también tendrá en la figura de su entrenador, Javier Aguirre, a un nombre clave para la tranquilidad de la entidad. El preparador mexicano ha conseguido imprimir su carácter en un equipo que se ha reforzado con Cyle Larin, Toni Lato, Omar Mascarell, Manu Morlanes y Siebe Van der Heyden para dar guerra en la zona media de la tabla sin sufrir.
Y los recién ascendidos, Las Palmas, Alavés y Granada, a priori, pelearán por no perder la categoría, aunque a veces, como el Girona la pasada campaña, se puede caer de pie en Primera División. Eso esperan canarios, vascos y andaluces, asentarse en la máxima categoría del fútbol español y ahuyentar el espantajo de la Segunda División.
Juan José Lahuerta