Madrid, 8 abr (EFE).- El Atlético de Madrid no se conforma ni con la tercera posición ni con su mejor racha de esta Liga con cuatro victorias seguidas ni con su serie de once jornadas invencible en esta competición ni con sus seis triunfos en las últimas siete citas ni con la década que suma sin perder con el Rayo Vallecano, al que visita este domingo con su propuesta de ser segundo.
De momento es sólo eso, una proposición. Impensable no hace mucho, ahora siente que es real. Al inicio de la jornada, lo separan cinco puntos del Real Madrid. Quedan once duelos. Necesita ganar con la misma voracidad y constancia que lo está haciendo ahora. Como lo hizo contra el Real Betis (1-0), el Valencia (3-0), el Girona (0-1) y el Sevilla (6-1). Su última derrota es de hace tres meses: el 0-1 contra el Barcelona el 8 de enero.
Son cuatro triunfos seguidos, los tres más recientes imbatido (no ocurría desde el 5 de diciembre de 2020 en LaLiga Santander, cuando encadenó idéntico número que ahora), con un aspecto completamente distinto al que tenía antes del Mundial 2022, cuando dimitió de la Liga, a la que ha llegado tan tarde que no le queda ninguna opción ahora, ni siquiera con la suma de puntos de las últimas diez citas del campeonato: ha contabilizado 26 de 30. Un 86 por ciento.
Sólo el Barcelona ha sido más productivo que él en este tramo, con 27 puntos. Ni se acercan el resto. El Real Madrid, el tercero en ese sentido, el segundo de la clasificación al que se plantea desbancar el Atlético, ha conseguido 18 de 30. En comparación, en la primera parte de la Liga, hasta el Mundial 2022, el club rojiblanco sólo se adjudicó 24 de 42. Un 57 por ciento. Es el reflejo de la transformación del equipo.
Hace diez jornadas, por ejemplo, el Atlético estaba a siete puntos de la tercera plaza, que hoy no es simplemente suya, sino que además lo es con la expresiva ventaja de seis puntos sobre la Real Sociedad. Su colchón para el acceso a la Liga de Campeones, su objetivo prioritario, es aún más grande: nueve puntos más la diferencia particular en sus enfrentamientos directos con el Betis, que ocupa la quinta plaza.
En memoria de Marcela Martínez, madre de Ángel Correa fallecida el pasado jueves, el Atlético lucirá brazaletes negros en su visita de este domingo a Vallecas, donde no dispondrá previsiblemente del atacante argentino. Es duda. Tampoco de Memphis Depay y Reinildo Mandava, bajas por lesión. Vuelve Sergio Reguilón a la convocatoria, pero al banquillo, porque el once sostiene su base tan definida ya.
Fuera Memphis por segundo encuentro seguido y, en principio, sin Correa, con el que Diego Simeone probó el miércoles en el probable once, la titularidad será para Álvaro Morata por segundo choque consecutivo, con lo que el único cambio será Rodrigo de Paul, que retomará su puesto en la alineación inicial en el lugar de Thomas Lemar, respecto al 1-0 al Betis.
El resto ya se recitan de memoria: el portero Jan Oblak, quien se convertirá este domingo en el jugador extranjero con más partidos de la historia del Atlético, con 390; los defensas Nahuel Molina, Stefan Savic, José María Giménez, Mario Hermoso y Yannick Carrasco; los centrocampistas Marcos Llorente y Koke Resurrección; y el delantero Antoine Griezmann, además de De Paul y Morata.
El Atlético de Simeone tan solo ha perdido una vez con el Rayo: el 10 de febrero de 2013 por 2-1 en Vallecas. Lo ha ganado en seis de sus últimos siete duelos, pero no en el último, en el 1-1 en los instantes finales en el Metropolitano de la primera vuelta, cuando eran otros tiempos para el Atlético, lleno de dudas entonces y repleto de certezas ahora, cuando rebusca su quinto triunfo consecutivo en la Liga.
Enfrente, el Rayo camina en sentido inverso. Inició la segunda vuelta del campeonato liguero en puestos europeos, en los que llegó a estar cuatro jornadas seguidas, pero ahora atraviesa un bache de resultados que se prolonga desde hace dos meses.
El equipo franjirrojo enlaza siete partidos sin ganar. Su última victoria fue el 6 de febrero ante el Almería en Vallecas. Desde entonces, lleva cinco empates (Getafe, Sevilla, Athletic Club, Girona y Valencia) y dos derrotas (Cádiz y Celta de Vigo) que han frenado su progresión. Aún así, su situación es cómoda y, con 37 puntos, espera lograr esta semana una victoria que cambie la dinámica y les permita celebrar de forma virtual la permanencia.
Andoni Iraola ha repetido en numerosas ocasiones que el principal objetivo es llegar a los 40 puntos y, a partir de ahí, ilusionarse con nuevas metas, algo que esperan lograr esta misma jornada.
El técnico vasco cuenta con todos sus efectivos para el partido. La única duda es la del extremo izquierdo Álvaro García, que se retiró del partido frente al Valencia con problemas musculares, aunque en el cuerpo técnico esperan contar con el sevillano.
La incógnita radica en la decisión que tomará Iraola para su ataque en función de si juega con dos delanteros, lo que supondría que Sergio Camello y Raúl De Tomás saldrían de inicio, o si por el contrario mantiene la apuesta por Óscar Trejo en la mediapunta, teniendo que elegir entre uno de los dos rematadores para ser titulares.
– Alineaciones probables:
Rayo Vallecano: Dimitrievski; Balliu, Lejeune, Catena, Fran García; Valentín, Comesaña; Isi, Trejo, Álvaro; Camello.
Atlético de Madrid: Oblak; Molina, Savic, Giménez, Hermoso, Carrasco; Llorente, Koke, De Paul; Griezmann, Morata.
Árbitro: De Burgos Bengoetxea (C. Vasco).
Estadio: Vallecas.
Hora: 21.00.
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Puestos: Rayo Vallecano (9º, 37 puntos); Atlético de Madrid (3º, 54 puntos).
La clave: La pegada del Atlético contra la fragilidad defensiva del Rayo las últimas jornadas.
El dato: El Atlético de Simeone sólo ha perdido uno de sus 16 enfrentamientos con el Rayo Vallecano, con 12 victorias y tres empates.
Las frases:
Simeone: «Un apoyo infinito a Correa y su familia».
Óscar Valentín: «Todo lo que sea sumar nos acercará al objetivo».
El entorno: Los jugadores del Atlético de Madrid portarán brazaletes negros en memoria de Marcela Martínez, madre de Correa fallecida el pasado jueves.