Escasea el gas licuado derivado del petróleo para el uso doméstico en el Eje Panamericano, donde la infinidad de hogares están cocinando a la antigua, con leña, esto porque los revolucionarios de la región comenzando por el gobernador Henry Rangel Silva, los alcaldes seguidores del proceso y la gente de Pdvsa, no se dan por enterados de esta situación, que perjudica a los hogares directamente, siendo inconcebible, según lo dicho Jaime Moreno, vecino de Granados, que en un país petrolero no haya gas para uso doméstico, mientras que la estatal petrolero lo bota en La Ceiba.
Similar situación se presenta en Rafael Rangel, donde se ven bombas de todo tipo colocadas a la orilla de la vía que conduce de Betijoque a Valera esperando el camión que distribuye el GLP.