Don Tulio Montilla fue uno de los primeros escritores que se ha ocupado de historiar ese sector plano de nuestro estado que se llama la zona baja o eje panamericano, especialmente Sabana de Mendoza, el lar de sus ancestros, para rescatarla del anonimato, que es como decir la muerte.
Hoy en Historias de Vida rendiremos tributo a este gran personaje trujillano. Un hombre con una rectitud envidiable, de conducta intachable, con un intelecto y conocimiento que lo catapultaron a lo más alto de la estima, de la candidación y del ejemplo. Don Tulio Montilla fue persona afable de extraordinarios valores morales y éticos. Un conocedor de la historia de su pueblo como pocos.
Don Tulio Montilla Aranguren, nace en Sabana de Mendoza, un 29 de octubre de 1906.
Según lo que hemos podido investigar sobre su legado, don Tulio desde niño, oyó muchas historias de la conquista, la colonia y el procerato regional que le removieron el orgullo. Todas las referencias de la grandeza estaban centradas en Trujillo, Escuque, Boconó y Betijoque. Toda la dinámica social se centraba en esos nombres geográficos que después en la escuela los maestros ratifican en las clases de historia. Buscarle partida de nacimiento a Sabana de Mendoza fue el gancho de don Tulio, y lo asumió como tema existencial, flanqueado por dos razones poderosas. Una, la fundamental, encontrarse con la naciente de sus aguas, su raíz y reencontrarse con la historia. La otra, un ejercicio de permanente buceo mental derivado de su formación cultural, que lo realizó espiritualmente.
La tradición oral con la que trabajó Don Tulio, conforma un legado apreciable para desentrañar la vida del país, a través de la existencia menuda de las modestas comunidades “juglar” de Sabana de Mendoza.
La sabiduría del relato
De Don Tulio se han escrito innumerables y excelentes crónicas y semblanzas, de esos tantos, hoy rescataremos algunos fragmentos del exquisito prólogo que escribiera Víctor Bravo para la segunda edición, texto aún sin publicarse de Lo Contó El Abuelo.
Según la descripción de Víctor Bravo, durante su existencia Don Tulio Montilla (1096-2003) se desenvolvió de la crónica a la ficción: memorialista de Sabana de Mendoza, que logró crear una obra narrativa que se desprende de la crónica hacia las posibilidades lúdicas y reflexivas de la ficción, haciendo de Sabana de Mendoza el espacio de las representaciones donde el acontecer cotidiano se trama con las resonancias universales de lo imaginario; articulándose de este modo a ese singular espesor de la condición imaginaria que parece tener en Trujillo importantes manifestaciones, tal como puede verse en la obra de sus grandes creadores, de Ramón Palomares a El hombre del Anillo, de Josefa Sulbarán a Antonio Pérez Carmona”.
En otro aparte, el escritor y poeta se refiere a que: al acaecer de la vida familiar y colectiva alcanza el trazado ficcional en relatos que se alimentan de la levedad de lo oral, de su ritmo, de su canto, de su danza de repeticiones, y se teje en una sabiduría de la frase y de la escritura. Para Víctor Bravo, el legado dejado por Don Tulio Montilla nos lo refleja, el pasaje permanente de la oralidad a la escritura, “pasaje que es, como se sabe, momento excepcional de la sabiduría de los pueblos. Los relatos se nutren de los juegos de la ficción: así el tramado del enigma, así la genealogía que hace de cada nombre y de cada personaje la posibilidad de un relato. Y se nutren de la génesis mítica de la oralidad; de este modo estos relatos se desplazan de lo fundacional, propio del mito, a los juegos de la ficción. Lo amoroso en los relatos de Tulio Montilla propicia el aparecer de la belleza y del enigma de la condición femenina, pero también de su fragilidad propensa permanentemente a la soledad y al silencioso desfiladero de lo trágico”.
Testimoniales
Para completar este trabajo, contamos con la opinión de tres personalidades muy ligadas a Don Tulio. Eleazar Montilla, Iris Godoy y Williams Castellanos nos ofrecen sus puntos de vistas sobre el aporte fundamental del “juglar” de Sabana de Mendoza.
Eleazar Montilla
“Don Tulio Montilla no solo escuchó los relatos centenarios sobre el origen de la posesión “Pedro Felipe”, territorio en el cual se encontraba Sabana de Mendoza, sino que también conoció gran parte de aquellas personas que se establecieron en el lugar en sus inicios, supo de los primeros esfuerzos por organizar el incipiente poblado y escuchó innumerables relatos que hoy constituyen su génesis histórica.
Lo fundamental es que don Tulio Montilla atesoró todos estos recuerdos y muchos años después los vertió a la escritura legando a las generaciones contemporáneas información proveniente de una fuente primaria, y que de no haber sido así, se hubiera perdido en la desmemoria colectiva que no tenía la suficiente sagacidad como para entender el valor de aquellos acontecimientos domésticos y cotidianos que ocurrían en el contexto local. En concreto, en Sabana de Mendoza tenemos historia porque don Tulio Montilla nos hizo ese inestimable legado.
Iris Godoy
“De Don Tulio: Considero que su aporte fundamental fue registrar los acontecimientos de la Mendoza de ayer para los que no la vivimos, pero sabemos que en la historia local están nuestras raíces. Su trabajo plasmado literariamente de una manera fresca, recogida por la narración oral de boca en boca y parte, también vivida por él, ha permitido que al pasar del tiempo, la historia siga viva y nos obligue a rememorar o a indagar el pasado para entender quizás el presente.
Fue un trabajo interesante, plasmado mes a mes en el Mensuario Viajo Contigo que editaba el padre Antonio Laglera, lo que lo acreditó para que el otrora ayuntamiento rangeliano lo nombrara como Cronista de Sabana de Mendoza. Gracias a su constancia, tenemos historia local.”
Williams Castellanos
A parte de ser un excelente maestro, Don Tulio comenzó a publicar en el mensuario «Viajo Contigo» un segmento titulado Crónica y Sucesos que editaba el padre Antonio Laglera, estos aportes literarios de su autoría enriquecieron la historia de nuestro pueblo en sus comienzos, sus relatos perdurarán en el tiempo y en el corazón de los sabanamendocinos que nos sentimos orgullosos de nuestro coterráneo.
TRADICIÓN
ORAL
La tradición oral con la que trabajó Don Tulio, conforma un legado apreciable para desentrañar la vida del país, a través de la existencia menuda de las modestas comunidades “Juglar” de Sabana de Mendoza.
HISTORIAS
DE VIDA
refleja a Don Tulio Montilla como un trujillano ejemplar, de los grandes intelectuales de nuestra trujillanidad. Maestro por excelencia. Con un intelecto y conocimiento que lo catapultaron a lo más alto de la estima, de la candidación y del ejemplo. De lo que hoy día quedan muy pocos.