Domingo de Ramos… Jesús triunfante en Jerusalén

 

El Evangelio de Mateo 2,  dice sobre la tradicional celebración del Domingo de Ramos, que  cuando se acercaron a Jerusalén y llegaron a Betfagé, al monte de los Olivos, entonces Jesús envió a dos discípulos  diciéndoles: Id a la aldea que está delante de vosotros, y enseguida hallaréis un asna atada y un pollino con ella; desatadla y traédmelos. Y si alguien os dice algo, decid: El Señor los necesita. Y enseguida los enviará.

4  Y todo esto aconteció para que se cumpliese lo que fue dicho por el profeta, cuando dijo:  Decid a la hija de Sion: He aquí, tu Rey viene a ti, manso y sentado sobre un asno ,y sobre un pollino, hijo de animal de carga. Entonces los discípulos fueron e hicieron como Jesús les mandó;  y trajeron el asno y el pollino, y pusieron sobre ellos sus mantos; y él se sentó encima.

Y la multitud, que era muy numerosa, tendía sus mantos en el camino; y otros cortaban ramas y palmas de los árboles y las tendían en el camino.  Y las multitudes que iban delante de él y las que iban detrás aclamaban, diciendo: ¡Hosanna al Hijo de David! ¡Bendito el que viene en el nombre del Señor! ¡Hosanna en las alturas!

Y al entrar él en Jerusalén, toda la ciudad se alborotó, diciendo: ¿Quién es este?   Y la gente decía: Este es Jesús, el profeta, de Nazaret de Galilea. Hossana Jesús Bendito… el Verdadero Rey ha entrado triunfante a Jerusalén!

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