En el inicio a clases de este lunes un grupo de docentes dependientes del Ministerio de Educación, decidieron salir a protestar frente a la sede de la Zona Educativa Táchira -ZET-, ubicada en la quinta avenida del centro de la ciudad de San Cristóbal, por considerar que sin salarios justos, instituciones educativas adecuadas y los insumos necesarios para los alumnos, no hay como garantizar calidad educativa.
El presidente de la Federación Nacional de Trabajadores de Venezuela -Fenatev-, Gerardo Ramírez, aseguró que este lunes asistieron pocos docentes y niños a las escuelas, estima que un 15%, ante la falta de transporte, insumos y alimentos.
«No vi ni un alumno en el transporte, ni caminando por las calles de San Cristóbal, y la mayoría de los centros educativos permanecieron cerrados. Los maestros a lo mejor no escucharon el llamado de protesta, pero tampoco asistieron a las aulas, porque no tienen cómo pagar transporte, cómo vestirse, ni con qué comerse una arepa. Hoy los niños no tienen nada que comer», expresó.
Precisó que decidieron salir a protestar no solo por mejoras contractuales, sino también porque el 95% de la infraestructura está dañada, los laboratorios de física, matemática y biología fueron eliminados, no hay Programa de Alimentación Escolar -PAE, y los niños no tienen útiles, ni uniformes.
“También nos estamos oponiendo a los maestros express, los maestros chimbos con los que pretende suplir el gobierno nacional producto de la tragedia, del tsunami, de la hecatombe que está ocurriendo en el sistema educativo venezolano”.
Por su parte, Evencio Zenón, representante del magisterio tachirense, precisó que también están exigiendo al Ministerio de Educación que cumplan con lo pactado en abril de 2018 cuando firmaron la segunda contratación colectiva, pues hasta la fecha les adeudan a los docentes el 180% del incremento salarial por vía de contrato, por lo que no habría razones para iniciar las clases.
«Un salario que oscila entre 80 mil y 100 mil bolívares mensuales no alcanza para pagar el pasaje. Solamente en San Cristóbal el pasaje vale 2 mil bolívares, un docente que tenga que movilizarse a nivel urbano gasta 4 mil bolívares diarios, hablamos de 20 mil bolívares la semana, hablamos que en 15 días gasta 40 mil bolívares, en un mes 80 mil bolívares. ¿Cómo poder responderle así a un niño?”, se preguntó.
Más docentes que alumnos
Joel Viña, es docente de la Escuela Nacional La Concordia, aproximadamente un 80% de los maestros asistieron, mientras que de alumnos fue un 50%, de 500 niños en la matrícula. Él decidió salir a protestar este lunes exigiendo mejoras salariales. «No comparto que hayan asistido a dar clases, porque así como estoy yo que no me alcanza el sueldo, a ellos no les alcanza el sueldo. Todos los docentes tenemos que estar en pie de lucha, porque además no aceptamos los docentes express, nosotros estudiamos cinco años, tenemos maestrías, postgrados y no va a venir alguien con un mes de formación a darle clase a los niños», dijo.
Yoneida Villarreal, da clases en la Escuela Nacional Graciliano Colmenares, ubicada en la localidad de Táriba, municipio Cárdenas, indicó que de 26 docentes solo faltaron 6, quienes participaban en la protesta frente a la Zona Educativa, mientras que de una matrícula de más de 100 niños, llegaron unos 30. Precisó que los estudiantes están sin uniformes, que el Programa de Alimentación Escolar -PAE- no funciona, aparte de que a la institución educativa le han robado implementos importantes para la formación. «Por eso protestamos y pedimos a los representantes que nos apoyen, lo que exigimos también es para sus hijos», expresó.
Por su parte, Lenard Carvajal, docente del Liceo Simón Bolívar, manifestó que los docentes se ven obligados a tomar las calles, porque un salario no les alcanza ni para un cartón de huevos, no cuentan con un HCM digno, ni con un servicio funerario.
«Yo no tuve derecho a un seguro para atender una infección en el oído de mi hijo. Los profesores les decimos a la sociedad que estamos dispuestos a seguir trabajando siempre y cuando la dignificación docente sea una prioridad», dijo.
Explicó que en el caso del Liceo Simón Bolívar esta semana inician las actividades administrativas, y en octubre las académicas, pero comentó que no hay iluminación, muchos baños están cerrados, el servicio del PAE se ha visto afectado, por lo que los estudiantes reciben es arroz y caraota como menú.
Gisela Labrador, es docente jubilada, acompañó la protesta de los docentes activos, porque el Ministerio de Educación les debe el 197% del año 2018. “Esta protesta se hubiese evitado si Aristóbulo Isturiz le habla claro al presidente… No se han dignado de hablar de los docentes, cómo está la calidad de vida de nuestros docentes que somos quienes nos levantamos a las 5 de la mañana para llegar a nuestras escuelas y liceos”.
Los maestros en protesta afirmaron que muchos de ellos no se atrevieron a salir a manifestar, en temor a que desde el Ministerio los dejen sin salarios.