Luego de los hechos violentos suscitados el pasado miércoles la ciudad de Maracaibo, en su casco central volvió a la calma. Como es del conocimiento público y especialmente por imágenes difundidas a través de las redes sociales, los buhoneros que hace meses fueron desalojados del mercado Las Pulgas se enfrentaron en la avenida Libertador a efectivos de la Guardia Nacional Bolivariana, en descontento por el plan de desalojo del casco central, lanzado por el gobernador de la entidad, Omar Prieto.
Los uniformados hicieron uso de bombas lacrimógenas y perdigones para reprimir a los manifestantes. Un trabajador que se encontraba en las adyacencias de la avenida Libertador aseguró que tienen que pagarle desde 10 millones a 12 millones de bolívares soberanos a funcionarios policiales y efectivos militares para que los dejen entrar la mercancía.
Asimismo, los trabajadores denunciaron que el alcalde de Maracaibo, Willy Casanova, les pide hasta 400 dólares para darles el mismo permiso. “Nos sentimos humillados, no servimos para nada porque necesitamos el pan de cada día”, dijo el afectado.
17 detenidos tras hechos violentos
El alcalde de Maracaibo, Willy Casanova, dijo, que hasta el momento hay un saldo de 17 personas detenidas tras los hechos violentos suscitados en el casco central de la capital zuliana.
“Al final de la tarde, sobre las 2:00 pm, hora en que logramos precisar la calma en la avenida Libertador, se precisaron 17 detenidos, retenidos por la Guardia Nacional Bolivariana”, puntualizó Casanova, quien dijo aún no se maneja información precisa sobre posibles heridos en el sitio.
Por otro lado, el alcalde Casanova sostuvo que “a la situación con los buhoneros se le mezcló actores de la guarimba, había gente encapuchada, gente que hizo destrozos. Esos no son actores de la economía informal, sino otras fuerzas que se movieron en el día de hoy”, apuntó.
Adicional a ello, el alcalde denunció que individuos dañaron cámaras del VEN 911 que registraron gran parte de lo sucedido. Informó también que un grupo violento ingresó a las Torres Petroleras, tras lo que cerca de 12 vehículos resultaron afectados, pues les fueron reventados sus vidrios, acciones que, aseguró, fueron neutralizadas, por lo que no se registraron daños adicionales.