El Hospital Universitario “Erasmo Meoz” de la ciudad de Cúcuta, Departamento Norte de Santander – Colombia, se ha convertido en un centro de alivio para los venezolanos que no consiguen como hacerse tratamientos en los hospitales de su país, pues sobre todo a los pacientes críticos les han dado la oportunidad de ser atendidos.
Hasta 150 venezolanos llegan a diario como nuevos ingresos al centro asistencial. A pesar de que las autoridades del hospital tienen capacidad de respuesta tanto del personal de salud, como de camillas e insumos, en algunos momentos enfrentan limitaciones pues las medidas tomadas por el Ministerio de Salud de Colombia han sido primordialmente para la atención de los ciudadanos de su país, como ocurre en todas las naciones.
En los casos que se refieren a curas de alguna herida sin dificultades, vacunación o asistencia médica primaria, los ciudadanos de distintos estados de Venezuela son enviados a los ambulatorios habilitados para tal fin o a los container de la Cruz Roja Internacional, ubicada en Villa del Rosario, conocido como La Parada de Cúcuta.
La líder de Servicio Ambulatorio del hospital “Erasmo Meoz”, Yeni Peña, indicó que la mayoría de los venezolanos llegan con enfermedades avanzadas como: cáncer, insuficiencia renal, tuberculosis resistente, y en situación de desnutrición avanzada, lo que complica el estado de salud, porque al no tener condiciones nutricionales difícilmente la persona tiene la posibilidad de recuperarse de su enfermedad.
“Es una situación preocupante para nosotros, porque además de esos problemas de salud muy graves, cada día están llegando personas diferentes, no son las mismas las que están utilizando los servicios de salud, porque usted puede decir, bueno son las mismas que van y vienen, pero todos los que llegan son nuevos. Esto está ahondando la crisis, porque la capacidad de respuesta aunque nosotros somos un hospital experto en manejar situaciones de emergencia, enfermedades graves, realmente nos estamos quedando cortos para poder atender a todas las personas. Quisiéramos hacerlo pero es imposible”, expresó.
Cuentan con una capacidad en la emergencia de 75 camillas, pero al momento de la entrevista tenían 150 pacientes hospitalizados, además de los que esperaban afuera para ser atendidos en consulta. La mayoría son venezolanos, el 30% de los pacientes del hospital son provenientes de este país.
El 60% de las mujeres que atienden en sala de parto también son venezolanas, la mayoría llegan con condiciones nutricionales regulares, otras en estado de desnutrición. Yeni Peña refirió que además les preocupa que según un informe del Ministerio de Salud hay un aumento de enfermedades infecciosas, de casos de sífilis en los 24 departamentos donde hay venezolanos, lo que aumenta el riesgo de las condiciones de salud pública en Colombia.
“Las dificultades que presentamos a la hora de atender es que quisiéramos tener todos los recursos para atenderlos, pero es prácticamente imposible, la demanda es cada vez más alta y como les decía la mayoría de los pacientes llegan en un estado complicado de salud”, destacó.