Zulma López / DLA.- Un ambiente de alegría, fe y esperanza se vivió este miércoles en el estado Táchira, al realizarse la celebración eucarística por los Cien años de la Diócesis de San Cristóbal.
Miles de personas llegaron desde diferentes municipios del Táchira hasta el gimnasio «Campeones Mundiales del 97», ubicado en la parte alta de la ciudad. El espacio deportivo con capacidad para más de 7 mil espectadores, estuvo totalmente lleno de feligreses, autoridades religiosas, encabezadas por el obispo de San Cristóbal, Monseñor Mario del Valle Moronta y autoridades del gobierno regional presididas por el gobernador, Freddy Bernal, así como alcaldes, concejales y diputados.
Desde las poblaciones de Palmira, Capacho, Pregonero, Ureña, Táriba, Michelena y San José de Bolívar, entre otras, llegaron las personas a participar en esta actividad que se convirtió en una de las manifestaciones públicas y religiosas más importante de los últimos años en el estado Táchira.
Los feligreses que llegaron desde diferentes partes del estado Táchira, venían preparándose desde hace algunas semanas con toda la logística, tal es el caso de un grupo de 50 personas que viajaron desde la población de San José de Bolívar en el municipio Francisco de Miranda. Jhonny Mora, contó que se levantaron a las tres de la mañana, hicieron sus arepas y viajaron hasta San Cristóbal para estar presentes en tan importante celebración religiosa. Aseguró que mientras estuvieron en el lugar le pidieron a Dios que ayude al mundo porque hay muchos problemas.
De la población de Pregonero viajaron desde las 3:30 de la mañana unas 15 personas que cargaban una pancarta que decía «Peregrinos de Uribante».
Marcos Fernández, quien es de la población de Pregonero manifestó que: «este es un encuentro de todos los tachirenses unidos, rescatando nuestra Iglesia católica y unidos con el que lleva el bastón que es el Obispo».
Luz Marina Candelo, se trasladó desde la localidad fronteriza de Ureña con un grupo de personas que viajaron en tres autobuses. Pertenecen a la iglesia San Juan Bautista y el padre de esa parroquia, Luis Useche, fue el encargado de organizarlos.
«Vinimos a pedir la bendición para Venezuela y para Colombia porque hay muchas necesidades grandísimas, que el Señor nos los selle con su sangre preciosa y nos los llene de mucha paz y prosperidad y que haya trabajo para todos», manifestó.
Carmen Cano, se encontraba con sus tres hijos en el lugar, en sus brazos cargaba a su pequeña hija de tres meses de nacida. Relató que se trasladó de la población de Capacho y con una gran sonrisa dio a gracias a Dios por el centenario de la Diócesis. «Amo mucho a mi madre, a mi Señor y a mi Iglesia y estoy feliz de estar aquí», expresó.
Contó que desde hace un mes se estaba organizando, junto a un grupo de 35 personas, para estar presentes en la celebración.
Es importante destacar que la organización del evento contó con un gran equipo de apoyo que estuvo a cargo de los integrantes de Cáritas.
De la organización hay que destacar que al culminar el evento se le entregó comida a los asistentes. «Todo muy bien planificado, tomaron en cuenta todos los detalles, y esto de atreverse a dar alimentos para tanta gente y de verdad que la ceremonia fue fabulosa y la homilía espectacular», destacó Eleonora Roa, quien se encontraba junto a un grupo de amigas disfrutando el almuerzo que les entregaron.
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