Los padres y representantes, quienes llevaron a sus hijos a la oficina del Saime, en el municipio Valera, denunciaron que tuvieron que llegar desde las 3:00 a.m. para hacer fila y, aunque los trabajadores de la institución, comenzaron a laborar desde las 5:00 a.m., todavía a las 12:00 p.m. no había salido la mitad de los niños atendidos en el primer día de jornada.
Algunos de los declarantes explicaron que la lentitud ha ocasionado malestar en los niños, que se observaban sentados en el suelo de la sede, dormidos, sin haber ingerido alimentos.
De acuerdo a los trabajadores, el proceso está organizado para atender entre 400 y 500 niños, pero en ocasiones se cae el sistema y deben esperar unos minutos para que vuelva.
Además, están implementando un nuevo requisito para la identificación de los venezolanos, que implica el registro manual de todas las huellas dactilares. Un método que, hasta hace poco solamente usaban los cuerpos de seguridad.
En cuanto al retiro del documento, los primeros se llevaron su cédula, pero el resto deberá buscarlos entre jueves y viernes.