«Las declaraciones del presidente Juan Manuel Santos referente a la compra de votos de ciudadanos colombianos por parte de Nicolás Maduro para el proceso electoral del próximo domingo 20 de mayo es sumamente grave, por cuanto compromete seriamente a quien aspira a reelegirse como presidente de un país que tiene en contra y cuya elección es cuestionada ampliamente por la comunidad internacional que la ha calificado como carente de toda transparencia y legalidad».
Así se expresó Walter Márquez, diputado jubilado a la Asamblea Nacional y presidente de la organización de defensa de los derechos humanos Fundación El Amparo, quien además manifestó que la denuncia del actual presidente de Colombia ratifica la información que maneja sobre una alianza entre el candidato de izquierda a la presidencia del vecino país, Gustavo Petro, y las organizaciones armadas al margen de la ley las Farc y el ELN de facilitar votos para Nicolás Maduro, y posteriormente el gobierno venezolano le retribuiría también con votos de venezolanos al candidato Petro en las elecciones del 27 de mayo.
Estamos en presencia de una operación política binacional –expresó Márquez-, montada por el comando de Petro en Colombia y el comando de Nicolás Maduro en Venezuela, por lo que es una situación que debe ser investigada por el Consejo Nacional Electoral en Venezuela, la Registraduría Nacional de Colombia, y por las fiscalías de ambos países, por cuanto se demuestra la injerencia de Venezuela en la compra de votos colombianos, cuando toda elección debe respetarse como un derecho humano donde prive la imparcialidad.
También agregó Márquez que se debe tomar en cuenta la calidad del denunciante. “Es el propio presidente de Colombia, quien basado en información de inteligencia policial y militar hace estos graves señalamientos, por lo que las autoridades de ambos países deben unir esfuerzos para frenar este tipo de acciones que ensombrecen la transparencia de esos procesos electorales, y en el caso de Venezuela ratifica el espíritu dictatorial de Nicolás Maduro que pretende seguir en el poder valiéndose de cualquier fraude, trampa o argucia”.
NP