Desde hace un par de años, médicos, enfermeras y residentes del servicio de cirugía general del hospital Rafael Rangel de Boconó, fueron resilientes ante la realidad de pandemia y accedieron a trabajar en un espacio físico inconcluso, cerca de la emergencia.
Luego de muchos sacrificios e inversiones particulares para adecuar el servicio, autoridades sanitarias amenazan con quitar este espacio para habilitarlo como hospitalización.
«Estructuralmente estamos al lado de la emergencia, pero funcionalmente es el servicio de cirugía y traumatología», explicó la fuente que por temor a represalias prefiere mantenerse en anonimato.
«Ya los médicos cirujanos, residentes y enfermeras se reunieron y la posición es renuncia masiva si nos quitan el espacio», advierte.
Pide sea considerada esta intención y evaluar otros espacios del nosocomio para atender el colapso de la emergencia. «Boconó está actualmente sin traumatólogos fijos y podría quedarse sin cirujanos», añadió.
Redacción Periodista @soykarleyduran