El transporte público en la ciudad más comercial del estado Trujillo ha caído a un nivel deplorable, esto dentro de los servicios básicos urbanos, Valera cuenta con una escasa cantidad de unidades, mal estado de las mismas, pagos excesivos por aumentos ilegales del costo del pasaje y para completar el dilema escaso o nulo cumplimiento de las rutas.
Los usuarios se quejan de la calidad del servicio y del trato de los conductores para la población, en especial para los discapacitados, tercera edad y estudiantes que deben pagar el pasaje completo en unidades de transporte en malas condiciones y saturadas de pasajeros que de pie toman el riesgo de “meterse en esas trampas”, como son conocidas.
Carencia de asientos, agujeros en la tapicería, en el suelo, ventanas inservibles que asfixian a los usuarios en horas pico de calor, huecos en el suelo por donde entra el vapor de la carretera, metales salidos de las paredes, cableados inseguros, tubos rotos para sostenerse y más, es a lo que se enfrentan los valientes trabajadores y estudiantes que hacen vida en la ciudad.