El próximo 27 de junio se cumple un año desde que familias del sector Los Llanitos, parroquia La Puerta, perdieron todo lo que tenían debido a una vaguada. Dos casas quedaron completamente inhabitables, y a pesar de las promesas de reubicación siguen esperando que les sean asignadas unas viviendas dignas.
“Nosotros solo queremos soluciones ya”, dice Aracelis Espinoza con la voz entre cortada y los ojos llenos de lágrimas.
Espinoza es una de las habitantes de Los Llanitos que perdió su casa y todas sus pertenencias con la vaguada. “Nos quedamos solo con lo que teníamos encima, perdí todas mis cosas. Es difícil uno después de 50 años quedarse en cero”, lamentó la madre de familia.
Esta valerana debió mudarse a casa de un vecino, quien le prestó un cuarto para que viviera. Sin embargo, ya el dueño del inmueble le ha pedido que desaloje el lugar. Aracelis no tiene a donde irse.
“Yo vivía en esa casa con mi hija, éramos 5 en total los que vivíamos allí, pero mi hija y su esposo tuvieron que irse a otro lugar porque aquí no cabíamos los 5 en un solo cuarto”, relató Aracelis Espinoza.
Rosa Rondón es otra de las personas que se quedó sin hogar debido a la tragedia, ahora ella vive alquilada en La Puerta con su hija menor de edad, pero anhela que les brinden nuevamente un hogar propio. La casa de Rondón es prueba de la tragedia, su fachada blanca se observa manchada con tonos marrones debido al barro que la inundó en aquel momento.
“Todo dentro de la casa quedó lleno de tierra, solo pude salvar las cosas que eran de madera porque las lavamos con un cepillo”, mencionó Espinoza.
La casa que está justo al lado de la de Aracelis, es de su sobrina María Espinoza, ella aún vive allí. “Mi casa está en alto riesgo”, cuenta la joven quien también recibió la promesa de parte del Gobernador de ser reubicada.
María no tiene para donde irse, por eso no abandona su casa, afirma que está allí por la necesidad, pero vive con una angustia constante de que se vuelva a repetir la tragedia.
Estas tres Valeranas ruegan al Gobernador que les agilice el proceso de reubicación.
Canalización de la quebrada
Geraldin Mendoza, miembro del consejo comunal Los Llanitos El Pedregal, explicó que la mayor necesidad que tienen dentro de la comunidad es la canalización de la quebrada, para evitar que continúen los deslaves cada vez que llueve.
Mendoza afirmó que todas las casas del sector se encuentran en riesgo debido al paso de la quebrada. En Los Llanitos viven 88 familias.
La vía principal Valera – La Puerta también se ve afectada por los deslizamientos que causa la quebrada. El barro y las piedras obstaculizan el paso de vehículos en esa altura. A pesar de esto, los vecinos tratan de mantener los desagües de las orillas de la carretera limpios para evitar mayores daños.
Los habitantes de este sector, también sueñan con tener calles pavimentadas, y toda la comunidad alumbrada. Pero, el riesgo que representa la quebrada para el bienestar de todos, hace que esas necesidades pasen a un segundo plano.
Por: Génesis Chinchilla ECS