La sociedad mundial y en particular la venezolana está envuelta en una diablura de corrupción masiva, así lo considera el presidente de la Fundación Propuesta País, Néstor Rincón. “Digo eso, porque en algunas administraciones públicas, quienes están llamados a combatir la corrupción, terminan promoviéndola de forma masiva”, cuestiona.
Para Rincón esos funcionarios públicos inventan mecanismos que fungen como alcabalas, cuyo objeto es facilitar las coimas (“recompensas”). “Violan procesos legales de contratación descaradamente y para que no les reclamen, entonces reparten dinero público sin control de la sociedad, corrompiendo desde los pobres hasta los que andan en aviones privados, que son los que se llevan la mejor parte del festín criminal”.
Explica que los diversos modus operandi de la corrupción van desde corromper la dignidad de las personas a cambio de una dádiva (regalo) hasta compartir gigantescas comisiones salidas en forma disimulada de los erarios públicos, a través de órdenes de pago (valuación) por “servicios” u “obras públicas” muchísimas de las cuales no se llegan a ejecutar.
Ser rico…
“Nadie pide cuentas ni rinde cuentas, en una suerte de rapiña (robo) colectiva donde el hambriento deseo de riqueza fácil, hace que pierdan los mínimos modales de apariencia, que luego se restriegan en sus caras a los ciudadanos decentes. Aviones, carros último modelo y blindados, casas lujosas, joyas de invalorable valor, son mostrados en algunas fotos en las redes sociales. Por eso afirmamos que: ¡ser rico a costa del dinero público, es malo, muy malo! Sobre todo para los demás ciudadanos decentes que terminan pagando las consecuencias de una sociedad desmoralizada y arruinada”.
No sólo funcionarios
La corrupción en términos sencillo, puede definirse como “el mal uso o abuso del poder público para beneficio personal y privado”, entendiendo que este fenómeno no se limita a los funcionarios públicos. Por lo general se apunta a los gobernantes o los funcionarios elegidos o nombrados, que se dedican a aprovechar los recursos del Estado para de una u otra forma enriquecerse o beneficiar a parientes o amigos.
Un mal costoso
La corrupción política se refiere al mal uso del poder público para conseguir una ventaja ilegítima generalmente de forma oculta, secreta y privada. Por eso el término opuesto a corrupción política es la transparencia. De allí que para medir los niveles de corrupción se use el nivel de transparencia en la administración de la gestión pública.
“La corrupción es un mal costoso que amenaza a empresas, gobiernos e instituciones de todo el mundo. Sus efectos son tan dañinos a corto como a largo plazo y si se expande puede tener devastadoras consecuencias económicas, ambientales, sociales y de reputación (…) ¿Se puede evitar la corrupción de la sociedad? Sí, y el ejemplo de Georgia y Singapur son prueba de ello”.
Un ejemplo a seguir
Rincón explica que Georgia, un país ubicado entre Rusia y Turquía, se liberó del yugo de la corrupción a partir de su separación de la Unión Soviética en 1991. “Antes de esa fecha todo en ese país estaba dirigido por corruptos. Desde los policías y recaudadores de impuestos hasta los principales responsables de los gobiernos y oficinas públicas. Comenzar una empresa en Georgia era prácticamente imposible sin que el interesado tuviera que pagar algún tipo de soborno”.
Detalla que mientras que el Estado presentaba déficit monetario, la élite política se hacía muy rica con fondos públicos. “Esto duró hasta el año 2003 cuando un nuevo gobierno decidió declararle la guerra a las malas prácticas que llevaban décadas arruinando a ese país”.
Principales estrategias en lucha contra la corrupción
Algunas de las principales medidas estratégicas tomadas en Georgia fueron:
1) Reforma del cuerpo policial: se aprobó una legislación anti-mafia, se despidieron 16 mil policías y se contrataron varios contingentes de reciente graduación de la universidad. A estos funcionarios los dotaron con mejores salarios y se les instruyó en la política de tolerancia cero contra la corrupción. Arrestaron a cientos de personas contra las que existían pruebas de actos de corrupción, incluso ministros, jefes de empresas de servicios públicos, entre ellos el jefe de la compañía de ferrocarriles y hasta el poderoso presidente de la federación de fútbol.
2) Reforzamiento de la recaudación de Impuestos Internos: la misma política de tolerancia cero se aplicó a las instituciones encargadas de recaudar impuestos los cuales no sólo subieron en cantidad sino que mejoró significativamente la inversión de esos recursos en servicios públicos.
3) Minimización de trámites de negocios: las regulaciones para los negocios fueron reducidas como estrategia para la creación de nuevas empresas. Igualmente se eliminaron las licencias y permisos en un 84% para inversionistas locales y extranjeros.
“Cabe destacar que el principal factor para reducir drásticamente los niveles de corrupción fue la participación de los ciudadanos en los asuntos públicos de Georgia, pues antes cuando la Unión Soviética era nula. No obstante los nuevos gobernantes adoptaron la decisión de facilitar esa participación ayudando a la creación de organizaciones de la sociedad e involucrándolas en la formación, ejecución y control de la gestión pública”, Néstor Rincón.
¿Se pueden aplicar las medidas adoptadas por Georgia a otros países?
Para Néstor Rincón, sí es posible. “Claro que sí, basta que los ciudadanos tomen conciencia de la importancia de su participación en los asuntos públicos y por ende en los destinos de su país, para que conjuntamente con las autoridades asuman el compromiso de eliminar los obstáculos para su desarrollo social y económico, y uno de los más importantes de ellos es la corrupción. En conclusión si hay un compromiso ciudadano que exija más voluntad política para la elaboración de planes con objetivos concertados sobre este problema y cualquier otro de la sociedad se obtendrán muy buenos resultados como los alcanzados en Georgia y Singapur en materia de anticorrupción”.
Venezuela muy mal posicionada
Un grupo de expertos puntúa un amplio grupo de países, utilizando la escala hacia el 0 como las peores (percepción de altos niveles de corrupción) y hacia 100 las mejores (percepción de muy bajos niveles de corrupción) para obtener la clasificación de los países en función de la percepción de corrupción del sector público.
Índice de Percepción de la Corrupción 2016
Lugar País/Territorio Puntuación
1 Dinamarca 90
2 Nueva Zelanda 90
3 Finlandia 89
4 Suecia 88
5 Suiza 86
6 Noruega 85
7 Singapur 84
8 Holanda 83
9 Canadá 82
10 Luxemburgo 81
LOS PEORES DE LA CLASE
166 Venezuela 17
168 Guinea-bisseau 16
169 Afganistán 15
170 Libia 14
171 Sudán 14
Fuente: Transparencia Internacional
Última palabra
“Una vez más hacemos el llamado a los venezolanos que decidieron quedarse a luchar por un mejor país, para que se sumen a la exigencia que entre todos debemos hacer a todos los partidos y políticos, para que presenten planes de desarrollo que incluyan objetivos específicos, sometidos a consulta abierta, donde los ciudadanos podamos opinar sobre cuáles son las mejores medidas para superar los principales problemas del país y en especial la corrupción, que es después del hambre el más grave”, este es el exhorto de Néstor Rincón.