“Tuve que hacerlo, para no ser el “quedao”, el tonto del grupo, es más, si estamos en fiestas, fumar me hace llamar la atención de más mujeres” es el razonamiento de algunos jóvenes
Jacobo Urdaneta (ECS)
Una encuesta realizada a 13 jóvenes de una urbanización del municipio San Rafael de Carvajal del estado Trujillo dio como resultado que el 76,9% (10) de los individuos incursionaron en el consumo de cigarrillo a causa de la presión por parte del grupo de amigos, mientras que un 32,1% (3) no fuma.
“Por lo general fumo bastante, pero cuando empecé no me gustaba mucho, lo que pasa es que todos mis “panas “lo hacían y tuve que empezar a fumar para no tener que oír el “chalequeo” de ellos, por meses cuando todos empezaron, tardé un tiempo en hacerlo, no me parecía algo bueno, pero hace tiempo tuve que hacerlo, para no ser el “quedao”, el tonto del grupo, es más, si estamos en fiestas, fumar me hace llamar la atención de más mujeres. Expresó Juan José Araujo de 17 años (nombre ficticio).
El consumo de cigarrillo de los jóvenes de esta urbanización se debe a presión social por parte del grupo de amigos o círculo social al que pertenecen. Una encuesta realizada a 13 jóvenes con edades de 13 a 20 años de este complejo, reflejó que 76,9% (10) de los individuos utiliza cigarrillos y un 32,1% (3) no fuma, de estos 10 el 90% (9) decidió fumar por insistencia o recomendación de un amigo que ya lo hacía, el 60% (6) aseguró que fuman actualmente por estar en ambiente con los amigos, otro 40% (4) respondió que para hacer las mismas actividades que sus amigos y un 0% respondió hacerlo por motivos como relajación o adicción, el 70% (7) expresó que le importa la opinión que los demás sobre él, el 90% (9) respondió que si sus amigos vieran mal el vicio de fumar, no lo harían.
Aceptación social
Ante la pregunta ¿Sientes que tus amigos te aceptan totalmente? el 20% (2) expresó que sí, mientras que el 30% (3) manifestó que siempre buscaban las maneras de estar bien con ellos y 50% (5) confesó no estar seguros, por otra parte 50% (5) aseguró que prefieren fumar en reuniones o fiestas, mientras que el 30% (3) respondió en tiempos libres con los amigos y tan solo un 10% (1) prefiere fumar solo.
La psicólogo Betania Barrios, egresada de la Universidad Rafael Urdaneta (URU) del estado Zulia, define la aceptación social como “una lista de requerimientos dictada por un grupo de personas de lo cual dependerá el sentido de pertenencia de la persona que desea integrarse, hay diversos grupos que establecen ese tipo de códigos conforme a intereses, tendencias y cosas de tipo básicas o complejas por ejemplo: grupos que incitan a matar, consumir drogas y o quebrantar leyes”.
Para la mayoría de los jóvenes es importante poseer la aceptación social, debido a que es un factor bastante determinante para lograr ser parte de un grupo, sobre todo en edades adolescentes de 13 a 17 años, cuando el joven cruza ese umbral, depende mucho de los juicios y opiniones que emitan los demás sobre él, teniendo en cuenta que al mismo tiempo se busca ese sentido de pertenecía, e ir escalando posiciones en el mismo, semejándose a un orden jerárquico, debido a que entre más realce tenga y llame más la atención, será mejor por que está en una etapa de egocentrismo, cabe destacar que la aceptación es importante en cualquier edad y ambiente, tales como laboral y o académico, expuso Barrios.
Alejandro Pérez Milena, médico de familia y coordinador del Grupo de Estudio del Adolescente de la Sociedad Andaluza de Medicina Familiar y Comunitaria (Samfyc) aseguró que la presión del grupo de amigos es un factor fundamental para iniciarse en el hábito tabáquico. “La necesidad de establecer relaciones sociales puede hacer que los adolescentes se sientan obligados ir a lugares de ocio donde fumar es algo normal”, explica Pérez. “Está comprobado que los adolescentes no fuman si los amigos no apoyan el consumo de tabaco”.
¿Qué tanto influyen las actividades y actitudes del grupo de amigos?
La psicólogo Barrios expone que depende si el individuo busca integrarse al grupo, sin necesidad de ligarse emocional, esto demuestra que el individuo solo se integra por necesidad o algún interés en común, por ejemplo; grupos de estudio, en estos casos se demuestra que dicho integrante posee una personalidad con rasgos firmes, debido a que sus decisiones no dependerán del juicio de otros, también existe el caso de que el individuo busca ligarse emocionalmente al grupo de personas; a diferencia del caso anterior observamos personas con personalidades más vulnerables, no se conforman con solo pertenecer, si no también conseguir una “consanguinidad emocional “lo que ahora escuchamos en frases de moda como “hermanos de otras madres”.
Un joven puede hacer actividades que no quiere realizar realmente, en la mayoría de los casos esto pasa porque los jóvenes se sienten con un gran compromiso de cumplir con todas las demandas que designen un grupo social, esto también ocurre frecuentemente con los vicios, no solo en el consumo de cigarrillo, en el consumo de cualquier sustancia lícita o ilícita.
“Un individuo puede encajar totalmente en un grupo si no realiza las mismas actividades de dicho grupo, pero, esto es un arma de doble filo, porque al oponerse a algún designio impuesto por el grupo, este está demostrando un punto de vista “oposicionista “y al mostrar su propia personalidad (personalidad firme) puede llegar a ser respetado y aceptado o denigrado y excluido de dicho grupo” asegura Barrios.
Influencia mediática
La psicólogo Marianela Sulbarán aseguró que “los adolescentes cada día observan en las películas, novelas, series de Tv a jóvenes y adultos que fuman, y que además tienen buenos carros, muchas mujeres, casas lujosas y una gran fortuna”.
“En estos programas, fumar se muestra como una norma social, es por ello que los jóvenes expuestos a dichas imágenes tienen más probabilidad de fumar. Asimismo, los jóvenes se identifican con compañeros o amigos que ven como líderes sociales y quieren imitar su comportamiento”.
Futuro incierto
Cada día, entre 80.000 y 100.000 jóvenes en todo el mundo se vuelven consumidores de cigarrillo. Si continúan, 250 millones de jóvenes que están vivos hoy, podrían morir a causa de enfermedades relacionadas con el consumo de cigarrillo. En la actualidad, el tabaco es la causa de muerte con más posibilidades de prevenirse en el mundo, los cuerpos de salud a nivel mundial deben poner manos a la obra, de lo contrario podría haber más de 8 millones de muertes al año para 2030.
Contenido y consecuencias
El cigarrillo contiene Nicotina: sustancia química que provoca la adicción, algunas estadísticas reflejan que la nicotina es tan adictiva como la cocaína, arsénico: elemento químico extremadamente tóxico, utilizado como compuesto del veneno para ratas, Alquitrán: una de las causas del cáncer, al inhalarse el cigarrillo se queda en los pulmones, amoníaco: gas tóxico incoloro con un olor muy característico y componente de los productos de limpieza, butano: se utiliza como combustible doméstico, para dar calor a cocinas, metano: combustible para cohetes espaciales y cadmio: presente en baterías, esta serie de componentes altamente nocivos es lo que hace que aparezcan consecuencias a corto plazo como la obstrucción leve de las vías respiratorias, función pulmonar disminuida y a largo plazo provoca enfermedades como cáncer de pulmón, cáncer gástrico, accidente cerebrovascular y enfermedad coronaria, sin contar que los riesgos asociados a fumar son mayores cuanto antes se inicie el vicio, además, los adolescentes son más vulnerables a los efectos adictivos de la nicotina, ya que su cerebro todavía se está desarrollando.