Por: Ysbel González Trejo
«Honroso sea en todos el matrimonio, y el lecho sin mancilla; porque a los fornicarios y a los adúlteros los juzgará Dios.» (Hebreos 13:4).
Valora lo que tenemos y dar importancia a lo más necesario es preservar el cuerpo de Cristo. El mundo nos ofrece muchas cosas distintas a las enseñanzas, por ello cada cristiano deber de velar todo el tiempo. Hebreos nos dan algunas indicaciones sobre ese compromiso como son los matrimonios se desprende de ello lo siguiente.
- Honra del Matrimonio
El matrimonio es una institución divina que debe ser valorada y respetada, reflejando la relación entre Cristo y la Iglesia.
- El Lecho Matrimonial
La intimidad sexual debe ser exclusiva entre los cónyuges, manteniendo la pureza y fortaleciendo la confianza.
- Consecuencias de la Infidelidad
La infidelidad tiene consecuencias graves, no solo para los involucrados, sino también para sus familias y comunidades.
- Prácticas saludables
Valorar el compromiso matrimonial, fomentar la comunicación y evitar situaciones que comprometan la pureza.
El matrimonio es un regalo de Dios que debe ser honrado. Al vivir en fidelidad y pureza, obedecemos a Dios y construimos relaciones significativas. Oren conmigo si lo desean, y Pidamos a Dios que nos ayude a valorar el matrimonio y mantener la pureza en nuestras relaciones. Amén.