Consultorio para el Alma | Son nuestras diferencias las que nos hacen únicos

Por: José Rojas

“Había entonces en la iglesia que estaba en Antioquía, profetas y maestros: Bernabé, Simón el que se llamaba Níger, Lucio de Cirene, Manaén el que se había criado junto con Herodes el tetrarca, y Saulo.”Hechos 13:1

La iglesia de Antioquía se había convertido en el centro del Cristianismo para los Gentiles. Vamos a echarles un vistazo a estos profetas y maestros de la iglesia de Antioquía:

* Bernabé, cuyo nombre significa «hijo de la motivación», fue el  que tomó a Saulo bajo su cuidado cuando nadie creía en él, y utilizó su credibilidad personal para ayudar a que la iglesia en Samaria y la de Jerusalén aceptaran a Saulo.

* Simeón, llamado Níger, fue desde el primer día Nigeriano y, probablemente, haya sido Simón de Cirene, que en Marcos 15:21 cargó la cruz de Jesús hacia el Gólgota.

* Lucius, probablemente fue traído a la fe por su amigo Simeón.

* Manaén, fue un miembro de la corte del Rey Herodes, así como un compañero de la infancia del Rey. Este fue el mismo Rey Herodes que mandó a degollar a Juan el Bautista, y sin embargo el Señor rescató a Manaén y lo puso en el ministerio.

* Saulo, que hasta este momento siempre ha sido mencionado después de Bernabé (por ejemplo, Bernabé y Saulo), sin embargo,  Lucas mencionará primero a Saulo, y también comenzará , a utilizar el nombre romano de Saulo: Pablo. Creo que esto se debe a que después de 12-14 años de ser cristiano, Saulo/Pablo está finalmente listo para comenzar su ministerio a los Gentiles. (No creyentes en Cristo)

Mirando más de cerca a estos líderes de la iglesia de Antioquía, empezamos a ver cómo Dios usa a las personas con antecedentes diferentes para servir en el ministerio. Recuerda que son nuestras diferencias las que nos hacen únicos e invalorables, nos unen o desunen. Con frecuencia nos comparamos con los demás y nos centramos más en las similitudes en lugar de en las diferencias. Una de las cosas más difíciles en nuestra vida Cristiana es permitirle a Dios descubrir y utilizar esas cualidades únicas que poseemos para servirle. ¿Cómo lo hace? Ocurre de forma natural cuando empezamos a servir a Dios. Cuando entras en servicio te darás cuenta que hay cosas en las que eres muy bueno y que nunca sabías que existían. ¿Has descubierto tus talentos (las habilidades únicas e invaluables que llevas dentro en Cristo)? Dios quiere que entres en servicio. ¿Cuándo fue la última vez que serviste?

joserojastrejo68@gmail.com

Salir de la versión móvil