Tú nunca digas que no sirves para nada, para Dios todos sirven; aunque no todos servimos para lo mismo. Si a Dios le plació usar un simple gallo para recuperar a un hombre como Pedro, de la misma manera puede usarte a ti.
1- El gallo se levanta temprano, de inmediato inicia su tarea que Dios le ha confiado ¿Cuál es la tarea que Dios te ha confiado?
2- El gallo nunca se niega a cantar, aunque existan turpiales que canten con dulzura. El gallo hace lo que puede de la mejor manera que sabe. ¿Cuál es tu actitud ante los desafíos de la vida?
3- El gallo sigue cantando aunque nadie lo anime ni se lo agradezca. Él no espera que nadie lo haga ¿Necesita de alguien que te estimule a seguir adelante?
4- El gallo despierta a los que duermen. Su tarea no es popular, pero es necesaria ¿A quien despiertas del letargo espiritual en que se encuentra tu iglesia?
5- El gallo proclama buenas noticias: Un nuevo amanecer. Cada mañana tú tienes la oportunidad de estrenar un nuevo día y de tener nuevas oportunidades. Cuando amaneces, ¿le cantas a los que están a tu alrededor o le desencantas?
6- El gallo es fiel cumplidor de su tarea. Se puede contar con él. No falla nunca. Es un excelente vigilante. ¿y tú eres fiel en tu trabajo?, ¿No robas tiempo a los demás?
7- El gallo jamás se queja de tener que hacer siempre lo mismo, de que nadie le felicite de que a nadie le importe ¿Cuántas veces nos quejamos de nuestro quehacer diario? ¿Cuántas veces queremos que el jefe nos dé un estímulo adicional para estar contentos con nuestra tarea?