¿Quién nos separará del amor de Cristo? ¿Tribulación, angustia, persecución, hambre, desnudez, peligro o espada? Como está escrito: “Por causa de ti somos muertos todo el tiempo; somos contados como ovejas de matadero”. (Romanos 8:35-36)
Pablo ha estado enseñando: «Dios es por nosotros; Él no condena; y Él nos dará toda cosa buena porque Él nos ha dado ya a Jesús.» Entonces llegamos a estos versos preocupantes cuando Pablo comienza a hablar de algunos temas muy impopulares en el cristianismo moderno: tribulación, angustia, persecución, hambre, desnudez, peligro, y espada (los cuales Pablo experimentó). Uno podría hacer la pregunta: «si Dios tiene todo bien guardado para nosotros, entonces ¿por qué tenemos que experimentar el resto?» Encontramos la respuesta en el verso 36 de nuestro pasaje de hoy (que es una cita del Salmo 44:22): «Pero por causa de ti nos matan cada día; somos contados como ovejas para el matadero.»
Tome un momento para visualizar una oveja – indefensa, fácilmente separada de la manada y sacrificada. Muchos cristianos han olvidado que nuestro ejemplo es Jesús, el Cordero de Dios (Juan 1:29): «Al siguiente día vio Juan a Jesús que venía a él, y dijo: “¡Este es el Cordero de Dios, que quita el pecado del mundo!» En cambio salimos contenciosamente cuando nos atacan – flexionando nuestros músculos físicamente, políticamente, y socialmente. Pero nuestras imágenes están equivocadas. Debemos considerarnos ovejas.
¿Quién considera que nosotros somos ovejas de matadero? Creo que es la actitud y el objetivo de un sistema mundial satánico de matar a cristianos en general. La historia de la Iglesia tiene muchos ejemplos del alto costo de vida y propiedades a consecuencia de seguir a Jesús. Recuerde lo que Jesús dijo en Juan 15:18: «Si el mundo os odia, sabed que a mí me ha odiado antes que a vosotros.»
Es seguramente inquietante leer y oír sobre muchas tragedias en las que han caído hermanos y hermanas cristianos – aun en nuestros días. Sin embargo, hay una cosa que sabemos: ¡Nada puede separarnos del amor de Cristo! Pase lo que pase – nada puede separarnos del amor de Cristo. Haga una pausa y agradezca al Señor por Su paz aun en tiempos turbulentos.
Fuente: Liga del Testamento
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