Héctor Rafael Briceño/DLA. .- Con el aumento anunciado por el gobierno nacional, no se está dando muestras de buscar conciliar con los trabajadores que prácticamente nos estamos muriendo porque el dinero no alcanza para cubrir alimentación y los servicios más básicos de una humilde familia venezolana. Así lo expreso Albino González, Secretario Ejecutivo Regional del Sindicato de La Salud del estado Trujillo (Sutset).
El aumento dado a conocer por el Ministro del Trabajo y por mandato expreso de la Presidencia de la República, no es más que una burla al pueblo venezolano. Este irrespeto, realmente constituye la multiplicación de nuestras miserias, una desvalorización al trabajo, una burla, vergüenza y humillación a la clase trabajadora venezolana.
Especialmente para los trabajadores, héroes de la salud, que se dan íntegros en los centros hospitalarios del país y ahora nos dan a conocer este aumento de 7 millones, más su bono de alimentación de 3 millones y no concebimos que el gobierno no se haya dado cuenta del alto costo de la vida por lo que se pone más en riesgo su seguridad social y el buen vivir de nuestras familias.
Mantenernos alertas
Nuestro llamado es para los trabajadores públicos en general, para mantenernos alertas para cuándo nos corresponda salir a reclamar nuestras mejoras reivindicativas, ya que el régimen persiste en su intento de utilizar el salario como moneda de subyugación o sometimiento de sus trabajadores y por ende de sus familias. Lo que buscan es que los trabajadores reciban ilusiones y no beneficios sustantivos para imponernos una vida en ruinas, pobreza extrema y llevando extrema, una vida mísera. Es que acaso podrán cubrir sus necesidades básicas todos los pensionados del Seguro Social, los jubilados y sobrevivientes de todo el país con 7 millones de ingreso fuera del bendito y limosnero bono de guerra para adquirir: Alimentación, medicinas, gas doméstico y demás servicios públicos indispensables?
Voluntad del pueblo
El gobierno lo que pretende es impedir la unión de la masa trabajadora con sus auténticos líderes, por lo que pretende imponer sus ídolos de barro, pues están convencidos que el camino de la verdadera democracia, ya se inicio y juntos constitucionalmente haremos que se imponga la voluntad del pueblo, sobre su fracasado proyecto ideológico.