Después de prácticamente 9 meses de la última misa a puerta abierta, vuelve la eucaristía a la Catedral de Trujillo con la novedad de la inscripción previa para poder asistir a la ceremonia., como si de un restaurante fino y elegante se tratara, las personas tendrán que enlistarse con la secretaría del despacho parroquial, ya que los cupos son limitados.
La medida está tomada para poder controlar y restringir la asistencia de personas de manera efectiva, debido al riesgo de contagios que puede haber durante la misa; puesto que los lugares cerrados y con poca ventilación son de los más propensos para el contagio.
Las ceremonias correspondientes estarán divididas de la siguiente manera: en la semana de flexibilización; los días martes, jueves y sábados serán a las 5: pm y el domingo con dos misas en la mañana a las 8: am y 10: am; también habrá misas en las semanas radicales los sábados y domingos, con los mismos horarios.
Mismo modus operandi
El protocolo para llevarla a cabo será muy parecido al que se utiliza para entrar a los establecimientos comerciales; con antibacterial en la entrada, toma de temperatura, uso obligatorio del tapabocas durante toda la ceremonia, y las novedades de la entrega de la comunión en la mano junto con la suspensión del saludo de la paz.
La entrada estará restringida para adultos mayores, un golpe duro para este público, ya que mucho de ellos son los que más han extrañado ir de forma presencial a los templos. También las personas con enfermedades crónicas y niños menores de 10 años no podrán asistir; estos podrán seguir la misa a través de la emisora radio paz 98.9 y TV Trujillo desde su casa.
Hugo delfin