Comunidades adyacentes protestan anarquía en colas bancarias

Inmensas colas frente al Banco de Venezuela.

Usuarios permanecen día y noche esperando para realizar sus operaciones bancarias. Interrumpen el sueño de los residentes y hacen sus necesidades en la calle donde son muy abundantes los desperdicios

Ya hemos planteado el tema de las colas bancarias incrementadas los últimos meses, al punto que lo que antes comenzaba en horas de la madrugada y luego se extendería a la tarde del día anterior, ahora son observados usuarios asegurando su puesto desde el viernes hasta el lunes. Nos podemos imaginar la mala alimentación, pero hay que preguntarse ¿Dónde y cómo hacen sus necesidades fisiológicas? Presuntamente hombres y mujeres orinan en la calle y si durante la noche, se presentan problemas estomacales, algunos más indispuestos defecan en la vía pública. Así lo denuncian residentes de la calle Sucre en comunicación enviada al alcalde Luis Hidalgo, para que este ayude en la búsqueda de una solución, lo cual incluye un pago más oportuno a los usuarios.

Solicitan solución

Nos dirigimos a usted muy respetuosamente con el fin de manifestarle la problemática que continuamente se presenta con las largas colas que se forman a las afueras del Banco de Venezuela. Las personas permanecen día y noche esperando turno para realizar las operaciones bancarias y durante su permanencia interrumpen el sueño de los residentes, hacen sus necesidades fisiológicas en la calle, abunda la basura por todas partes y por ausencia total de los organismos policiales, convierten estos espacios en una anarquía.

Vista la situación planteada, solicitamos ante ese despacho, la mejor solución para beneficio de los usuarios y de la comunidad. Esta comunicación fue enviada con CC a los siguientes organismos: Banco de Venezuela, Coordinación Fapet Boconó, Policía Municipal, GNB y el gobernador del Estado.


Fétido y nocivo

En calle Miranda las colas son frente a Delsur, Bicentenario y BOD.

Está comprobado que la orina con olor fuerte puede ser un indicio de deshidratación o infección y sin olvidar la aleación de los desechos fecales, por lo que ambos producen un olor fétido y nocivo para la salud, originando mareos, dolor de cabeza, molestias respiratorias y variaciones psicológicas.

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