Estimado amigos hoy les voy a escribir una crónica sobre la Urb. San Francisco de Borjas, mejor conocida como La Cienaga.
Gracias a la gentileza de mi amigo Ramón Flores llegó a mis manos una crónica escrita por el hoy fallecido Arnoldo Bolívar, un valerano a quien hoy recordamos por ser uno de esos personajes que dejó huella sobre lo nuestro y dejó cientos de imágenes fotográficas sobre la Valera de ayer, que ojalá estén en buenas manos.
Bolívar obtuvo la información sobre la génesis de La Ciénaga a través de un personaje del ayer como lo fue el conocido Pedro (Pan de Leche) Gamboa; excelente beisbolista de la epoca romántica del béisbol e integrante del famoso grupo «Culebro Club» y quien vivió por muchos años al final de la calle 13 en el sector Delicias, el cual colinda con las urbanizaciones La Ciénaga y Lazo de la Vega.
Acorde con la nota de Bolívar publicada en «Gente», en aquel lugar había una especie de laguna y existía un árbol frondoso denominado el cambomboro, también existía una trilla o «calle angosta» que servía de comunicación hacia el cementerio municipal, el quemador municipal y la vía que conduce a las vecinas poblaciones de Escuque y Betijoque.
En los alrededores de aquella laguna existió un saque de arena que servía para construir los tapiales de algunas casas en construcción y también se comentaba que hasta había babas, una especie de cocodrilos pequeños pero de eso no hay ninguna certeza.
Corrían los años 20, 30 del siglo pasado y Valera, ya era un dinámico cruce de caminos y una población comercial. En ella se había establecido gente de diversos lugares, al cabo de un tiempo el béisbol se convirtió en un pasatiempo popular y un grupo de promotores deportivos comenzó a pensar en qué hacer para poder construir un lugar en donde se pudiera practicar béisbol y atletismo. Para aquel entonces ya existían los equipos Bolívar, El Capitolio, Proletarios, Boconó y Los Piratas.
Se creó un comité central del deporte de Valera y se emprendieron las labores para la construcción de un estadium (Acta 15 de febrero de 1940) y se decidió al final hacerlo sobre el terreno del Cambomboro. El 16 de abril del 46, aquel comité logró comprar el terreno con vecindad a la laguna, a las hermanas Dolores y Ediglia Añez Montilla; se les compró el terreno y en el mismo se planificó construir el estadium. El precio del terreno fue de 2.500 bolívares, el Ejecutivo del Estado aportó Bs 1.500, la municipalidad Bs. 500 y el comité central de promotores Bs. 500. En aquel lugar con nuevos dueños se comenzó a jugar béisbol del bueno y comenzó hacerse famosa también la mujer de La Peineta, Basílica, la que con sus encantos, con su porte de bailadora de flamenco y una enorme peineta de carey en su pelo, embrujó a más de uno e hizo posible que, hasta un cerro cercano al Cambomboro llevara su apodo, «La Peineta».
Pasó el tiempo y no se pudo construir dicho estadium y fue así que se decidió construir la Urb. La Ciénaga, que la inició el Concejo Municipal en 1949. Aquella urbanización estuvo conformada por 14 casas grandes a un costo de Bs. 8.500,oo y 52 pequeñas a Bs. 5.550,oo y la obra fue realizada por el contratista señor Carlos Montiel Vílchez.
La Ciénega es hoy en día uno de los sectores más populares y bulliciosos de Valera, sus cerros más cercanos también fueron habitados y existen y existieron personajes populares como Alirio «Pata e´ croche»; primer vendedor de perros calientes y quien con su grito de guerra «llegaron los perros», anunciaba su presencia, como la Sra. Carmen, la que preparaba las mejores parrillas y las mejores arepas de hígado molido de la ciudad, como el boxeador Willian Flores.
Las esquinas como la Torito aún hoy con la crisis son bulliciosas y pachangueras.
Amigos, así ha sido el desarrollo de la ciudad desde sus inicios, con gente empoderada tal cual como la que junto a Monseñor José Humberto Contreras construyó la Urb. Lazo de la Vega.