El comedor de Alimenta la Solidaridad en la localidad de Santa Elena que tenía dos años de funcionamiento, perdió todos sus enseres y alimentos en medio de las aguas de la quebrada La Zorquera, que se desbordó la noche del martes 10 de noviembre a causa de las fuertes lluvias en Zorca
Con los desastres generados por las lluvias y el desbordamiento de la quebrada La Zorquera, que afectó sectores de Zorca San Isidro, Zorca Providencia, Santa Elena, Lagunillas de Zorca, San Jacinto, Pie de Cuesta y San Joaquín, de los municipios San Cristóbal, Capacho y Cárdenas, también resultó afectado el comedor de Alimenta la Solidaridad ubicado en Santa Elena, según informó este miércoles 11 de noviembre Fernando Márquez, integrante de la organización.
Márquez destacó que se perdió casi el 100% de los enseres, por lo que el comedor quedará paralizado durante un tiempo, pues además las madres colaboradoras en la preparación de alimentos también perdieron sus cocinas, bombonas de gas y parte de sus viviendas.
“Hubo una pérdida de casi el 100% de los utensilios del comedor, la cocina se pudo perder, las bombonas no se encuentran porque tal vez el desagüe se las llevó, por lo tanto el funcionamiento quedó totalmente inoperativo. La coordinación regional de Alimenta la Solidaridad evalúa en el sitio cómo ayudar lo más pronto posible para ayudar al personal del comedor, ya que muchas familias y madres ayudantes tienen afectadas sus casas y 100% de sus enseres”, acotó.
Destacó que el comedor de Santa Elena atendía a más de 80 niños en estado de desnutrición a unas 10 personas de la tercera edad que se encuentran en pobreza extrema. Están evaluando los daños con ayuda de organismos de seguridad y rescate, y esperan recibir apoyo de la ciudadanía en general para ayudar a las familias integrantes del comedor.
“Necesitamos ayuda”
José Luis Suárez Parra es el coordinador del comedor de Alimenta la Solidaridad en Santa Elena, sector, que junto a Cipriano Castro y Brisas del Pinar tiene más de 100 familias afectadas, cuatro de ellas con pérdida total.
Manifestó su preocupación por la situación del comedor y solicitó a la ciudadanía a apoyarlos con ropa, zapatos, productos de higiene, y alimentos. “Perdimos cocinas, no tenemos agua, no tenemos luz, tenemos el punto de recolección bajando de la alfarería Doña Flor”, acotó.
Gladys Ruiz (64) es una de las madres preparadoras de alimentos dentro del comedor. Su vivienda perdió una pared y el portón, por lo que su cocina, bombonas y enseres fueron arrastrados por el río. Visiblemente afectada pidió ayuda por sus vecinos, por los niños y personas de la tercera edad que quedaron sin nada. “Para mi es fuerte, es primera vez que me pasa esto, hay que pedirle a Dios y tener fe que no pasó a cosas peores”, destacó.