Los asesinos de Manuel Alejandro Silva Betancourt aún no están identificados. El Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc) indagan si, como denunciaron los familiares de la víctima, se trató de una ejecución por parte de presuntos funcionarios policiales. Hasta los momentos se basan en las declaraciones de la compañera sentimental del hoy difunto, única testigo del hecho. De acuerdo a este relato, el miércoles 3 de enero, uniformados a bordo de una patrulla, se lo llevaron a la fuerza, mientras la pareja compraba víveres cerca de su casa, ubicada en el municipio Motatán.

Una venganza

No obstante, los detectives no descartan otra hipótesis, según la cual otros individuos -no necesariamente efectivos policiales- lo retuvieron a la fuerza y lo mataron. Luego, a fin de despistar a las autoridades, abandonaron el cádaver de Silva en la carretera vieja Valera-Motatán, donde no dejaron evidencias (casquillos de bala). Lo que sí está claro es el móvil de venganza, pues no le quitaron sus pertenencias y sufrió al menos seis disparos. Dos en el abdomen, uno en el pecho y el resto en la cabeza. Todas estas heridas revelan la maldad de sus asesinos.

El Cicpc también indagará otras pistas. Una de ellas va a ser determinante: la data teléfonica. Esto se debe a que los familiares aseguran haber recibido llamadas de los victimarios, quienes le informaron dónde encontrar el cuerpo del joven, de 29 años de edad. Además, removerán los proyectiles que quedaron alojados en su piel, a fin de determinar el tipo de arma usada y hacer comparaciones balísticas.

Finalmente, sus familiares pidieron justicia, pues pese a que Silva tenía un pasado delictivo, ya había ajustado esas cuentas. Esperan que las autoridades consigan a los responsables.

Enemigos por su pasado delictivo

Otra arista que no pueden descartar los funcionarios del Cicpc son los posibles enemigos que tuvo Manuel Alejandro Silva Betancourt (29). Todos desprendidos de su pasada vida delictiva. De acuerdo al Sistema Integrado de Informción Policial (Siipol) el hoy fallecido tenía dos solicitudes, sin efecto; y cuatro antecedentes penales: hurto agravado (19-3-2017), hurto genérico (12-11-2016), poesión de drogas (20-03-2015) y comercio de estupefacientes (28-01-2008). Todos por el Cicpc-Valera.