Casa Municipal del Estudiante,conjunción de una acción social en favor de la educación

Valera, vivida, leída, escuchada y sentida (VII)

 

Lo más destacable de la Casa Municipal del Estudiante, durante 30 años en que se mantuvo en actividad desde su fundación en julio de 1975 fue sin lugar a dudas la total y voluntaria integración estudiantil, la mística que ellos mismos por propia iniciativa se impusieron. Ese era el criterio de la educadora, Aura Salas Pisani, quien fuera fundadora y directora de dicho centro.
Aura Salas, siempre se le veía entusiasmada con aquel proyecto. Denotaba satisfacción de una labor que, fue cumpliendo y culminando etapas, en forma satisfactoria.
La definición de la Casa Municipal del Estudiante se afianzó en el cumplimiento de sus objetivos específicos como fueron el de complementar estudios formales, regulares, de educación media, de postgrado y promover el mejor uso del tiempo libre… Comenzó como algo muy simplista, pero con la peculiaridad que la mejor opción de dirigencia la tenían los propios muchachos, hasta el extremo de que no hubo nunca la necesidad de imponerles una disciplina.
Para Aura Salas Pisani, los muchachos, «sus muchachos» eran la base fundamental del trabajo realizado. Y destacaba el comportamiento ejemplar de los estudiantes que, cada día, llenaban la Casa Municipal que ella dirigió con tanto amor.
Allí llegaban chavales de los distintos planteles educacionales de la ciudad y del Nurr. Ellos mismos la habían planteado como una escuela de liderazgo, porque eran ellos quienes ponían en práctica sus propias iniciativas, dentro de un clima de hermandad, ejemplarizante, hasta el punto que, Aura Salas siendo la directora, actuó como una simple amiga de todos.
La Casa Municipal del Estudiantes fue la conjunción de la acción oficial y la iniciativa privada en la que, la mecánica cooperativa, llegó a darse en plenitud y que nació precisamente por iniciativa de un grupo de estudiantes del Liceo «Rafael Rangel”, quienes le dieron en Julio de 1975 el nombre de Aura Salas Pisani a una promoción de humanidades y le plantearon la necesidad que tenían de una biblioteca, porque en el Liceo se había limitado el pase a la misma por necesidades imperiosas de espacio. Esa idea la llevó Salas Pisani al Concejo Municipal, en donde halló amplia receptividad al proyecto.
La Casa Municipal del Estudiante funcionaba todos los días de la semana, incluyendo los sábados que era precisamente cuando la visitaban los estudiantes de Escuque, Betijoque, La Quebrada y otros poblados circunvecinos.
La Casa del Estudiante en sus primeros años siempre recibió el apoyo del Concejo Municipal de Valera y del Ince que cumplían allí muchos de sus cursos con la responsabilidad y buena organización con que acostumbra el mencionado organismo hacer sus cosas. Hay que resaltar el hecho que Valera fue la única ciudad de los andes donde se dictaron cursos de inglés y por parte de la profesora norteamericana Iris Jonhson de Salcedo, que fue la fundadora de otra institución derivada de la Casa Municipal del Estudiante, que se llamó, el “Club de Inglés”.
Fue importante la gran receptividad que tuvo la Casa, por parte de la colectividad en general de la ciudad. Al igual que la promoción de los medios de comunicación.

Única
en estímulo

Siempre en su entusiasta dedicación a la causa estudiantil, Aura Salas tenía un proyecto que se vio truncado como lo era la creación de un refugio ecológico en la población de La Puerta para la formación directa de muchachos en la defensa de nuestra ecología y en el que participarían alumnos y profesores de los distintos niveles educativos.
Dicho proyecto no tuvo la receptividad debida de las autoridades del municipio y del ejecutivo regional. Lo mismo que sucedió con el destino de la Casa del Estudiantes, para la cual nunca se logró adquirir la edificación donde funcionaba en la avenida Bolívar con esquina de la calla 9. La institución de apoco fue mermando en sus actividades hasta que no aguantó más y todo aquello que con tanto amor se había edificado se fue derrumbado como se derrumbaba la casa de grande corredores, salón y paredes de barro con bahareque. La Casa Municipal del Estudiante de Valera, fue única casa en su estímulo que funcionó en el país

 

Aura Salas, un referente

 

Aura Salas Pisani falleció un 12 de febrero de 2002. Dejó profunda huella en el área de educación y cultura. Su presencia permanece en obras como el Ateneo de Valera, la escuela Eloísa Fonseca, la Casa Municipal del Estudiante, el Centro Educativo Rural, Taller Granja María Daboín de Muchacho, la Fundación Aula Móvil, entre otros.
Valerana nacida el 14 de octubre de 1925 , fue un ser a quien el tiempo le resultaba corto para realizar todas las actividades en pro de la comunidad y de su amada ciudad de Valera que se presta a celebra sus 200 años, con la que se sentía comprometida e identificada. Su nombre es de utilización obligatoria para todo aquel que desea hablar de nuestra historia en los últimos 100 años.
Foto 1: La Casa Municipal del Estudiantes fue uno de los grandes proyectos en favor de la educación valerana.

Repensar a
Valera es…

Saber que… La transformación urbana es posible a partir de una forma diferente de participación social, mediante alianza público-privada, haciendo política para lograr una ciudad más incluyente, donde la infraestructura y el urbanismo más lo social tengan un papel prioritario… Ya es hora que una ciudad como Valera próxima a cumplir 200 años dé el gran salto, el salto de atreverse a soñar en grande, atreverse a cambiar la sociedad y a la ciudad con base en la educación, la renovación urbana, el emprendimiento y la cultura, etc… (EHG).

Salir de la versión móvil