Una vieja casa ubicada en la calle Bolívar cruce con Carabobo, aunque no deja de traer gratos recuerdos – para el niño que todos llevamos dentro – se está constituyendo en una amenaza para los peatones que pasan frente a la antigua sede de Canastilla La Coromoto, donde también funcionó “La primera venta de helados de tizana en la calle arriba de Boconó”. Esta casa que también atenta contra el ornato de Boconó, sí estuvo siendo remodelada pero actualmente el friso de las paredes se está cayendo y por los aguaceros de los últimos días, los vecinos han presentado sus quejas ante los organismos, pero desconocen qué medidas se van a tomar, por lo que Protección Civil debería tomar las previsiones.