Esta carta ha de ser maravillosa como el número 7. Subir a un punto para estabilizarse, crear un equilibrio. 1- La decisión de apoderarnos de nuestra vida. 2- Ser francos con nosotros y los otros. 3- Quitarle el poder a quienes le dimos el poder. 4- Peregrinar a un mejor lugar. 5- Considerarse ciudadanos propositivos. 6- Entender que el problema no es ideológico. 7- El maravilloso número 7.
Salir de la cueva del esperar, del no hacer y del silencio aturdido implica salir a encontrarse con otros, desafiar al espanto y al temor de sentirnos descubiertos. Esto no es una campaña electoral cualquiera, es una peregrinación responsable para quitarle el poder a quienes les dimos el poder de administrar esta colonia republicana. Nos dirigimos a unas elecciones principales donde podemos dar una lección histórica y determinante para conducir a Trujillo a un mejor lugar, una última mudanza para dejar «al pasado pisado». Las energías ancestrales de nuestras abuelas y abuelos se asociarán con los mejores sueños de quienes no aceptamos vivir como esclavos. Nos avergüenzan los revolucionarios y los demócratas que se convirtieron en enemigos para repartirse lo que nos pertenece. Estos son una minoría con capacidad de manipular a los incautos ofreciendo una mejor vida. Han empeorado los años y en cada campaña ofrecen a granel resolverlo todo. Ya son unos zorros viejos ofreciendo baratijas como futuro.
Si para el 20 de julio el Consejo Nacional Electoral no nos otorga un nombre para tener tarjeta propia como movimiento regional (somos los únicos en solicitarlo) estaría violando derechos políticos y constitucionales. Y, además, sería la evidencia del temor que tienen las castas allí representadas al cambio de actitud de los trujillanos para detener a los ideólogos de la tristeza y de la muerte.
Por estas y todas las razones que nos animan, personales, familiares, colectivas y estelares, convocamos a la multiplicación de las salas de reunión como cordones umbilicales pegados al compromiso de esta última mudanza. De allí, les propongo la siguiente ACTA FUNDACIONAL:
«No podemos perder el futuro del Estado Trujillo por hacer las cosas mal. Nos afiliamos para impulsar la construcción de un buen lugar para vivir. Cerremos la puerta a los ideólogos de la tristeza, de la división, de la mentira, de lo que nos avergüenza. Todo lo que concierna a Trujillo lo decidiremos nosotros. Nos reunimos y afiliamos al Movimiento Casa Libre para hacer con el profesor Juancho José Barreto González el Gobierno Regional que queremos».
Con quien tienes al lado, tu vecino, con el amigo de otro municipio o parroquia, con quien se fue porque le quitaron la oportunidad de seguir aquí, con quien recién llega o recién conoces en el amor humano de este peregrinaje, con el militante decepcionado de izquierda y derecha mentirosa y entreguista, con quien siembra la tierra diseminando angustias, con la mujer que pila amaneceres, con el chamo rebelde que quiere tener causa para vivir, con quien apenas come y ríe corazones, con quien reparte de su propio pan para vencer tempestades, con quien no quiere cruzarse de brazos sino de caminos y ríos, con quien todavía cree en el amor por encima de todas las cosas, con quien no tiene precio porque lo humano no se mide con billetes, con quien duerme despierto para que no se lo lleve la muerte, con quien son humanos y ángeles, con quienes cantan estremecimientos, con quienes aman en silencio los atardeceres, con quienes quieren ser libres o más libres, con quienes no burocratizan el alma, con quienes aun lejos están cerca, con quienes aun cerca más se acercan, con quienes son bellos sin cosméticos, con quienes aún muriendo aman la vida, con quienes saben curar con las manos y las palabras, con quienes no tienen precio porque son gente. Firma el cuaderno de Trujillo, en la pared de tu casa o de la montaña, en la planilla impresa por la maestra o maestro de pueblos. Abramos la puerta para entrar a la gran sala de la reflexión y de los proyectos, urgentes y necesarios.
El 20 de julio se cierra la primera etapa de esta indetenible peregrinación, de este adueñarnos de la vida nuestra para superar el sistema nervioso del miedo y luchar por mejorar nuestro sistema inmunológico y cultural.
En algún momento nos veremos, más temprano que tarde en esta casa grande de cuatro esquinas. No es necesario gritar, no somos sala de batalla, ni rendir falsos testimonios, no somos jueces. Somos de carne y hueso pero con el temple necesario para espantar cobardes.
En Trujillo, a los 16 días de julio 2021
Profesor Juancho José Barreto González
Firmo con vuestros ojos múltiples!!
