La calle Monseñor Jáuregui que constituye una de las más transitadas arterias viales del Jardín de Venezuela, se encuentra a oscuras desde el pasado mes de diciembre.
Así lo dicen personas que residen por ese céntrico y amplio trayecto donde también los comerciantes se quejan que varias de las 10 cuadras que conforman la calle desde Loas Queseras hasta La Gran Colombia, se encuentran como boca de lobo, por lo que las familias se recogen temprano, aunque no dejan de escuchar algunos desmanes que se cometen y quizá para estos abusos quienes los ejecutan están amparados en la oscuridad reinante.
Recientemente el alcalde Lcdo. Luís Hidalgo informo a través de los medios audiovisuales que desde Caracas había recibido una buena dotación de bombillos para el alumbrado público de las 12 parroquias que conforman el municipio y al efecto también habían encauchado el camión cesta que es el apropiado para tal fin, por lo que en varias comunidades como: Batatal, Mosquey o El Volcán de Niquitao siguen a la espera que se proceda a colocar la iluminación tal y como fue anunciado oficialmente desde hace varias semanas, pero hasta la presente fecha no han visto que se cumpla lo prometido. Desde las parroquias presumen que las autoridades nacionales estarían pensando que las calles, plazas y parques de todas las parroquias de nuestra jurisdicción, tienen una buena iluminación, cuando la realidad es otra, porque al menos en El Carmen y Boconó, que muestran la cara del municipio, así lo reflejan.