Río de Janeiro, 9 jul (EFE).- La selección brasileña que se medirá a la argentina por la final de la Copa América practicó el cobro de penaltis este viernes, en su último entrenamiento antes del compromiso del sábado en el Maracaná de Río de Janeiro, ante la posibilidad de que el título sea definido desde los doce pasos.
Brasil realizó su última práctica antes de la final en la tarde de este viernes en la Granja Comary, el moderno centro de entrenamiento que tiene en la ciudad serrana de Teresópolis, y este mismo viernes se desplazó a Río para concentrarse para el partido decisivo.
El seleccionador brasileño, Adenor Leonardo Bacchi «Tite», contó con todos sus convocados en el último entrenamiento, ya que hasta el lateral izquierdo Alex Sandro se entrenó junto con sus compañeros tras casi una semana bajo cuidados médicos, pero no dio pistas sobre la alineación que podrá usar frente a Argentina.
El único brasileño vetado para la final es el atacante Gabriel Jesús, que tendrá que cumplir su segunda fecha de suspensión tras haber sido expulsado en el partido con Chile por cuartos de final.
La Confederación Brasileña de Fútbol (CBF) tan sólo transmitió 27 minutos del entrenamiento en sus redes sociales, ya que la prensa no tiene acceso a la Granja Comary por medidas sanitarias, y la señal fue interrumpida antes de que Tite separara a los posibles titulares para orientar los trabajos tácticos.
La asesoría de la CBF, sin embargo, informó que los brasileños trabajaron jugadas para agilizar la recuperación del balón, jugadas ofensivas y penaltis, que podrán ser decisivos para definir el título en caso de que persista el empate al final del tiempo reglamentario de 120 minutos, incluyendo los 90 minutos del partido y 30 minutos de prórroga.
Pese a la insistencia de Tite de no divulgar su alineación y mantenerla en secreto hasta pocos minutos antes del partido, lo más probable es que, con Gabriel Jesús sancionado y Alex Sandro apenas saliendo de la recuperación, Brasil se mida a Argentina con el mismo equipo con el que se impuso por 1-0 a Perú en las semifinales.
De esa forma contaría con Ederson en la portería; Danilo, Marquinhos, Thiago Silva y Renan Lodi en la defensa; Casemiro, Fred y Lucas Paquetá como centrocampistas; y Éverton Cebolinha, Neymar y Richarlison integrando el trío de delanteros.
La final de la Copa América medirá el sábado en el estadio Maracaná a Brasil, anfitrión, campeón vigente y máximo favorito, y a Argentina, que creció en sus últimos partidos guiada por Lionel Messi.
Será la primera final entre los históricos rivales sudamericanos desde la de la Copa América Venezuela 2007, vencida por Brasil.
Mientras que Brasil intenta retener el título conquistado hace dos años igualmente como anfitrión, confirmar la mejor campaña del torneo y elevar a 14 el número de partidos en que permanece invicta, Argentina busca poner un fin a su ayuno de 28 años sin títulos (el último fue la Copa América de 1993) y elevar a 20 el número de partidos en que no conoce la derrota.