París, 21 mar (EFE).- Camioneros, taxistas y pescadores protagonizaron este lunes algunos bloqueos en centros de distribución de mercancías y carburantes en Francia en protesta por la escalada de precios de los derivados del petróleo.
Unas protestas que hasta ahora no han causado desabastecimiento y que se llevan a cabo pese a la desconvocatoria de la huelga que había previsto organizar hoy una de las asociaciones de transportistas, después de que el Gobierno accediera el viernes a adoptar un plan de ayuda para el sector de 400 millones de euros.
Una de las regiones más afectadas por estos bloqueos fue Normandía (noroeste), donde la Prefectura del departamento de la Mancha advirtió este lunes en su cuenta de Twitter de ralentización en la circulación por la acción de piquetes en carreteras en torno a las localidades de Saint-Lô, Carentan y Lessay.
Cerca de Lyon (este), tractores, camiones y trabajadores del sector de la construcción bloquearon con sus vehículos y con neumáticos las entradas de la refinería de Feyzin.
En la región de Marsella (sureste), las protestas corrieron a cargo esencialmente de taxistas y chóferes de vehículos con conductor que no han conseguido ayudas específicas.
Cerca de la frontera belga, se organizaron operaciones de bloqueo y de ralentización de la circulación en autopistas como la A23 y la A1 (que va de París en dirección de Bruselas) así como en las plataformas logísticas de Dourges, cerca de la ciudad de Lens, y de Lesquin, cerca de Lille, según la eisora France Bleu.
Un grupo de pescadores bloqueó el acceso al puerto de la ciudad de La Rochelle (oeste), informó France Info.
Todas estas manifestaciones tuvieron lugar aunque el pasado viernes la Organización de Transportistas Europeos por Carretera (OTRE) había anunciado que desconvocaba las protestas para hoy después de obtener un compromiso del Gobierno de Emmanuel Macron, para dedicar una partida de 400 millones de euros para las empresas del sector.
Una partida que se viene a añadir a la rebaja de 15 céntimos por litro de carburante para clientes particulares y profesionales que se aplicará desde el 1 de abril y por un periodo de cuatro meses en las gasolineras a cargo de las cuentas públicas.
Una portavoz de la Federación del Comercio y de la Distribución (FCD), que reúne a las grandes empresas del sector, afirmó este lunes a Efe, que por ahora no hay problemas de abastecimiento en los supermercados e hipermercados franceses.
Añadió que tampoco tienen noticias de escasez de productos como el aceite de girasol por la guerra en Ucrania, que es uno de los principales países productores.