Viena, 14 nov (EFE).- Ante la incesante subida de las infecciones con el coronavirus y la creciente presión hospitalaria, el gobierno conservador-ecologista de Austria decidió este domingo restringir a partir de esta medianoche la movilidad de las personas no inmunizadas contra la covid-19.
«La situación es seria. La cuarta ola (de la pandemia) nos afecta plenamente. Eso se debe a la variante delta (del virus) pero también a la baja cuota de vacunación», dijo ante la prensa el canciller federal, el conservador Alexander Schallenberg.
Las medidas anunciadas hoy se calcula que afectan a unos 2 millones de los 8,9 millones de personas que viven en el país centroeuropeo, donde el porcentaje de vacunación alcanza un 65 %.
PORCENTAJE VERGONZOSO
«El porcentaje de vacunación es vergonzosamente bajo y sin subirlo no podremos salir de este círculo vicioso (de la pandemia)», señaló el canciller austríaco.
A partir del lunes, las personas no inmunizadas solo podrán salir de sus viviendas para ir al trabajo, eso sí, presentando cada día un test PCR negativo que se obtiene de forma gratuita y que no debe tener más de 48 horas.
También podrán acudir a sus centros de estudio o para satisfacer necesidades básicas como comprar alimentos y medicamentos, para ir al médico o a los centros de vacunación, todo ello, siempre con mascarilla de protección médica FPP2.
Igual que anteriores restricciones o confinamientos generales contra la pandemia en el pasado, todas las personas podrán salir a dar un paseo cerca de sus casas y podrán acudir a servicios religiosos.
Los menores de 12 años y las mujeres embarazadas no estarán afectadas por esta medida, al igual que los estudiantes de instituto.
Quedará prohibido, bajo amenaza de denuncia y multa, ir de compras a tiendas no esenciales, acudir a restaurantes, bares, gimnasios y eventos culturales y deportivos, entre otros.
Para alcanzar resultados tangibles, se necesita que estos contactos se reduzcan en un 30%, aseguró el ministro de Sanidad austríaco, el ecologista Wolfgang Mückstein, quien también habló de una situación «muy seria».
DUDAS y CRÍTICAS
Muchos expertos dudan que con las medidas anunciadas hoy se pueda alcanzar los resultados necesarios.
Un estudio presentado en Viena el pasado viernes y avalado por 33 científicos exige restricciones más amplias, como obligar también a los vacunados a presentar en lugares públicos, como restaurantes, cines, teatros y cines, test PCR negativos.
Mientras, los partidos de la oposición criticaron las medidas anunciadas hoy, sobre todo el partido ultranacionalista y antivacunas FPÖ, que habló de una «locura total».
Los liberales NEOS criticaron que los menores de 12 y 14 años también estén afectados por las restricciones, cuando estas personas están en una franja de edad que no les permite vacunarse sin el consentimiento de sus padres.
El partido socialdemócrata SPÖ, el más grande de la oposición y líder en las más recientes encuestas, no se pronunció al respecto pero la prensa local asegura que votará en contra de las medidas.
Las medidas anunciadas hoy serán controladas por la policía austríaca de forma aleatoria, con multas por incumplimiento de hasta 500 euros (570 dólares) para los particulares y de hasta 3.600 euros (4.129 dólares) para establecimientos que no cumplan las normas.
La norma que recoge las restricciones será adoptada esta misma noche por el Parlamento austríaco para un período inicial de diez días (hasta el 24 de noviembre), con la opción de ser luego extendida, lo que requerirá una nueva votación parlamentaria.
Mientras que la cúpula del ejecutivo anunciaba sus más recientes restricciones, en las afueras de la sede del Gobierno en Viena cientos de manifestantes protestaron contra las medidas.
¿ MÁS MEDIDAS ?
Mückstein no descartó «la necesidad de más medidas», sin dar detalles, en caso de que las restricciones anunciadas hoy no causen el efecto deseado.
Eso sí, excluido queda por el momento un confinamiento general para toda la población, esté inmunizada o no, ya que el Gobierno lo consideraría «injusto» frente a la población que se ha vacunado.
Desde el pasado 8 de noviembre las personas no inmunizadas ya no podían acceder a restaurantes y bares, una medida que ha impulsado de forma notable el ritmo de vacunación en el país, incluyendo decenas de miles que han acudido ahora a recibir la tercera dosis.
Las autoridades sanitarias informaron hoy de 11.552 nuevas infecciones con el coronavirus en las últimas 24 horas, con una incidencia general en siete días de 815 casos por 100.000 habitantes.
Desde el estallido de la pandemia en marzo de 2020 han fallecido en Austria 11.706 personas por complicaciones con la covid-19, mientras que 2.327 se encuentran actualmente hospitalizadas, de ellas 433 en unidades de cuidados intensivos.