Por Héctor Antolínez /Crónica Uno
Caracas. Como suele ocurrir a mitad de enero, Nicolás Maduro acudió a la Asamblea Nacional (AN) para rendir cuentas del desempeño de su gobierno durante el año anterior. Nuevamente, los datos duros como gasto público, presupuestos y cifras sociales fueron ignoradas durante un discurso de más de cuatro horas.
Para lo largo del discurso, fue poco lo que Maduro señaló en áreas vitales del país como educación, salud o salarios. Estos temas fueron tocados solamente superficialmente o, de plano, ignorados. En cambio, se destacaron “logros” abstractos como “unir a Venezuela en la defensa de la Guayana Esequiba” o “mantener la paz en el país”.
A continuación lo más relevante del discurso político de Nicolás Maduro:
Aumento de Ingreso Mínimo Integral
Al momento de hablar de salarios, Nicolás Maduro no dio respuesta a la carencia del ingreso formal de los trabajadores en el sector público del país. En cambio, se limitó a destacar el papel de los bonos discrecionales que su administración entrega a algunos ciudadanos.
En este punto destacó el “ingreso mínimo legal”, una cifra que surge de sumar el ticket de alimentación o cestaticket, con el bono de “guerra económica” que se entrega discrecionalmente desde el Sistema Patria.
Maduro anunció un aumento del ticket de alimentación a 40 dólares mensuales mientras que el bono de “guerra económica” se subió a 60 dólares. Este dinero seguirá abonándose en bolívares de manera indexada.
“Este es el primero de los empujes que vamos a dar”, adelantó Maduro, quien este año tendrá que postularse a la reelección para el cargo de presidente.
Cuatro conspiraciones magnicidas
En su discurso, Maduro dedicó casi una hora para denunciar la existencia de cuatro planes o conspiraciones para supuestamente asesinarlo a él y a otros miembros de su administración.
Maduro entregó a Jorge Rodríguez, presidente de la Asamblea Nacional, unos expedientes con las supuestas evidencias de estos planes. Previamente aclaró que “están todos desarticulados” y que culminaron con “el arresto de todos los involucrados”.
“Todos los culpables están detenidos, tenían como objetivo asesinarme, asesinar a Padrino Lopez y a otras figuras importantes de la política de Venezuela”, afirmó.
Comentó que uno de los planes involucraba el asalto a un comando del ejército en San Cristóbal, estado Táchira, durante la madrugada del 1° de enero. Otro plan que detalló buscaba asesinarlo a él junto con el ministro de la defensa, Vladimir Padrino López, durante una reunión en La Viñeta, residencia histórica de la vicepresidencia del país.
Maduro vinculó a estos planes al exalcalde mayor de Caracas, Antonio Ledezma, a quien llamó “el vampiro de Madrid”. En su acusación añadió que Ledezma pertenecía a una conspiración de “los apellidos del país” antes de lanzar una amenaza:
“Si ustedes me hicieran algo la pagarían tan caro que sus apellidos desaparecerían del país por 300 años. Nuestro pueblo sabría qué hacer, nuestra fuerza armada sabría qué hacer. Los planes están hechos. No les alcanzarían los siglos para arrepentirse y la mano larga de la revolución llegaría a ustedes dónde sea que se escondan, sea en Colombia, Miami o Madrid. Se los digo”.
Cifras superficiales de la economía
Las cifras sociales no fueron las únicas ausentes del discurso de Maduro, tampoco se hizo una gran profundidad en torno a las cifras económicas o presupuestarias. Dicho de otra forma, no detalló cuánto dinero tuvo en su poder ni en qué se lo gastó.
Aseguró que Venezuela tuvo en el 2023 un crecimiento del 5,5 % y que para el 2024 la previsión es que la economía venezolana crezca 8%.
Destacó también la desaceleración de la inflación la cual dijo se ubicó en 2,4 % en diciembre de 2023, esto en contraste de la inflación mensual de diciembre de 2022 que estuvo en 33 %.
El gobernante también dio a conocer que durante 2023 la estatal PDVSA aportó 6.230 millones de dólares al Estado venezolano. Estos ingresos se complementaron con la recaudación fiscal la cual totalizó 5.750 millones de dólares, un aumento del 26 % en comparación al 2022.
En materia crediticia, dio a conocer que en el 2023 la cartera de crédito productivo del país creció en 84 %. De acuerdo con Maduro, se entregaron financiamientos por un total de 1472 millones de dólares. Agregó que esta inversión permitió alcanzar la soberanía de consumo en rubros como: café, plátano, yuca, ocumo, queso blanco, leche completa, zanahoria, piña, guayaba, naranja, papa, cebolla, tomate, pescado, pollo y cerdo, entre otros.
De las pocas cifras sociales que dio a conocer, Maduro destacó la disminución en 16 % del índice delictivo. Sin embargo, no detalló el total de crímenes en el país ni la tasa de homicidio. También refirió 84 % de matrícula escolar pública (no informó de deserción estudiantil ni calidad educativa); y un índice de abastecimiento del 96,7 %. No obstante, omitió contrastar esta cifra con el consumo promedio en Venezuela en comparación con otros países de la región.
Mencionó las “mafias de corrupción” sin nombrar a El Aissami
Maduro también destinó parte de su discurso para referirse a “mafias de corrupción”. Enfatizó en que estos grupos atacaban al país y daban un golpe “silencioso” y “desde adentro” a la revolución chavista.
A pesar de esta referencia, Maduro no mencionó cuál es el paradero o el estatus de la investigación en contra de Tareck El Aissami, principal figura vinculada con el escándalo de corrupción dentro de PDVSA que en el 2023 fue desarticulada por el Ministerio Público.
“Si algo queda demostrado, pese a las campañas de la derecha maltrecha en redes, cuando somos nosotros los que desmantelamos y capturamos las mafias, es que hay una inmensa reserva moral en Venezuela, que los honestos, los patriotas, somos más. Este es el año de visibilizar esa tarea”.
Nuevas grandes misiones y un cargo para Alex Saab
En el mensaje anual, Maduro anunció la creación de dos grandes misiones para “el beneficio del Pueblo”. La primera de estas grandes misiones sería para apoyar a las personas víctimas de la “guerra económica”. Según el propio Maduro, se encargaría de “atacar a la pobreza y la desigualdad chocante que hay en el país”.
La segunda de estas misiones se llamará la Gran Misión Venezuela Joven. Con este programa se buscaría apoyar a los jóvenes, a quienes Maduro señaló como “las grandes víctimas de la guerra económica”. Las áreas que esta misión, que empezará en febrero, ocupará será el empleo, la cultura y el deporte. Esta misión tendrá como presidenta a la diputada del PSUV, Génesis Garvett.
Finalmente, Maduro anunció que Alex Saab, pasará a ser el presidente del Centro Internacional de Inversión Productiva, “para que pongas el dinero y los recursos a trabajar por el país”.