Dos ataques terroristas perpetrados por los talibanes dejaron a 71 personas muertas y 170 heridas en la frontera de Afganistán con Pakistán, informó el viceministro del Interior afgano, general Murad Ali Murad.
Hasta ahora se maneja que en la ciudad de Gardez fallecieron 41 personas y 160 resultaron heridas, cuando el complejo de las fuerzas de seguridad fueron atacados durante cinco horas. Tras varios enfrentamientos, cinco asaltantes fueron dados de baja.
Al mismo tiempo, a un centenar de kilómetros al este de Gardez, en la provincia de Ghazni, «veinticinco miembros de las fuerzas de seguridad y cinco civiles murieron, y diez personas resultaron heridas» en el ataque a la sede del distrito de Andar, según el viceministro.
Los talibanes reivindicaron los ataques y explicaron que fue ejecutado en respuesta a las operaciones que los drones estadounidense han llevado a cabo contra sus posiciones.
En ambos casos, el ataque comenzó por la explosión de vehículos bombas, camiones y un Humvee (potente vehículo militar multipropósito), que abrieron el camino a comandos armados.