En un día marcado por la fuerte probabilidad de lluvias el centro de Trujillo continúa con sus actividades económicas en esta semana de flexibilización.
Se pudo ver menos personas transitar en comparación con otros días, sin embargo la mayoría de los negocios siguen trabajando con normalidad, aplicando antibacterial o alcohol y con los respectivos tapabocas, aprovechando la medida de 7+7.
El banco Bicentenario fue el único que estuvo trabajando con una fuerte afluencia de personas de la tercera edad que esperaban su turno para poder hacer sus operaciones. Por orden fueron llamados uno por uno y así evitar la aglomeración dentro del banco, sin embargo fuera de ella no existía distanciamiento entre las personas.
También se pueden ver cada vez más carros que vuelven a utilizar las calles como estacionamiento, no obstante los embotellamientos son algo raro de apreciar, la circulación es más rápido porque casi no hay carros transitando, a pesar de que la distribución de la gasolina ha mejorado.