Robert José Asuaje Maldonado, de 20 años de edad, fue asesinado de 15 disparos el viernes a las 11:00 pm en el sector Brisas del Paraíso en la Cota 905. Asuaje era considerado un prospecto de baloncesto. Sus familiares relataron que él venía de un partido de básquet en una de las canchas de la zona, donde se realizaba un torneo, y a 4 cuadras de su casa 4 hombres armados se le aproximaron y le dispararon 15 veces. “Muchos de los tiros los recibió en el rostro”, aseguraron.
La madre de la víctima, quien no quiso revelar su nombre, narró que ella se encontraba cerca del lugar. “Había muchas personas alrededor y vi como a un hombre le dieron un cachazo en la cabeza”, indicó. Señaló que cuando volteó para verificar por qué habían golpeado a esa persona, escuchó los tiros y se percató de que su hijo estaba en el suelo. “De inmediato fui hasta donde estaba y lo abracé”, dijo.
Amigos de Asuaje lo trasladaron al Rescarven ubicado en La India, donde llegó sin signos vitales. Los parientes presumen que fue por intento de robo, pero como en el sector había mucha gente, salieron corriendo del lugar al matarlo sin quitarle ninguna de sus pertenencias. “Él siempre se vestía bien, con buena ropa”, apuntaron. El padre de la víctima afirmó que en reiteradas oportunidades le dijo a su hijo que lo quería sacar del barrio, pero que él se negaba argumentando que creció allí, que sus amigos, conocidos y su infancia estaban en ese sector.
Asuaje Maldonado jugaba baloncesto en la liga Firestone de Valencia como alero y estaba pretendido por el equipo Marinos de Anzoátegui para que jugara en sus categorías de menores. Parientes comentaron que ayer tenía un partido de la liga Firestone y que el entrenador le había escrito que contaba con él para el encuentro. Deja a una niña de dos años de edad y a su esposa embarazada. “Nos enteramos recientemente que estaba en estado”, indicó el padre de Asuaje. Vivía con su mamá y su pareja en el sector Brisas del Paraíso. Trabajaba con su papá, quien es comerciante, como ayudante en uno de sus negocios de venta de calzados y textiles deportivos en El Cementerio.
Zonas de paz. Extraoficialmente se conoció que los funcionarios policiales no pueden ingresar a la Cota 905 debido al restablecimiento de las zonas de paz. “Esas zonas hacen que los jóvenes se descarrilen. Los policías no pueden entrar y no hay seguridad”, manifestaron los familiares, quienes agregaron que “las zonas de paz son una protección para el delincuente”. Fuentes indicaron que hace dos semanas instauraron nuevamente esas zonas en la Cotan 905.