Con una tranca vehicular, familiares y allegados de la joven asesinada, se apostaron en la calle donde Wendy ejercía su trabajo, con pancartas en mano y lágrimas en los ojos reclamaron ante este hecho.
Según aseguran familiares de la víctima, Wendy se encontraba este viernes en su residencia ubicada en el sector El Alfarero del municipio San Cristóbal, fue allí para buscar algo de ropa y al momento de salir con una acompañante fue interceptada por un grupo de hombres que según la testigo «eran gobierno». Tatiana Benítez, hermana de la víctima, relató que los hombres llevaban armas y chalecos antibalas, «ellas salieron de la casa a comprar lo de la cena y la persiguieron, ellas entregaron lo que tenían, solamente el teléfono, ella no se resistió porque ya la habían robado hace un mes y ella se dejó robar, le quitaron una cantidad de pesos, y esta vez ya no tenían plata».
Robos anteriores
Tatiana Benítez, hermana de la víctima, aseguró que en los últimos 2 meses habían sido víctimas de robos, la primera ocasión sucedió en su lugar de residencia, posteriormente fueron perseguidas y las volvieron a robar.
Presumen que efectivos de seguridad tengan que ver con el hecho, explican que han sido extorsionados en otras oportunidades para dejarlos laborar.
Justicia para Wendy
«Yo quiero justicia por mi hermana, porque mi hermana era una muchacha trabajadora, guerrera con 25 años de edad, era lo único que yo tenía, huérfana de mamá desde los 3 años, y me le quitaron la vida así tan injustamente, nosotros lo que hacemos aquí es prestar un servicio, no robamos, más de un cliente sabe que nosotros lo que hacemos es trabajar, yo quiero que se haga justicia y no quede impune la muerte de mi hermana», afirmó Tatiana.
Denunció además que en los robos anteriores acudieron a la sede del CICPC, pero no recibieron respuesta ni actuaron, «muchos de mis compañeros han pasado por lo mismo, pero en esta oportunidad se pasaron».
Agregó que solo este organismo visitó el lugar del homicidio.