Quito, 9 abr (EFE).- El Consejo Nacional Electoral (CNE) de Ecuado inauguró este viernes la segunda jornada adelantada de votación en la segunda vuelta presidencial del domingo con la modalidad de Voto en Casa, por la que 653 personas mayores y con discapacidad están habilitadas para sufragar.
Desde las 07.00 de la mañana hora local las autoridades electorales acompañan este proceso destinado a facilitar el voto de electores con un 75 % de discapacidad y mayores de 50 años.
La presidenta del CNE, Diana Atamaint, detalló que son 323 hombres y 330 mujeres los inscritos para sufragar en sus domicilios, y lo harán siguiendo estrictos protocolos de bioseguridad debido a la pandemia de covid-19.
Para ello, funcionarios electorales seguirán 173 rutas a escala nacional, en las que 865 funcionarios de las 24 delegaciones provinciales participarán en el operativo de esta modalidad de voto.
En paralelo, el CNE garantiza el derecho al sufragio de las personas con discapacidad el próximo domingo 11 de abril mediante la habilitación de 385 mesas de atención preferente repartidas en 4.276 recintos electorales.
Se han impreso también 8.270 papeletas en braille para los electores con discapacidad visual.
Este mediodía se inicia la ley seca que se extenderá hasta después de la jornada electoral del domingo, junto con el silencio electoral después de que en la tarde del jueves se cerraran la campaña de los candidatos presidenciales.
Conforme a la normativa electoral, las infracciones a la ley seca por la que queda prohibida la venta y dispendio de alcohol acarrean una multa del 50 % de un salario básico (200 dólares).
La primera jornada adelantada del voto tuvo lugar el jueves en 39 penitenciarías en las que 8.307 privados de libertad estaban habilitados para sufragar.
Este domingo, algo más de 13 millones de ecuatorianos están llamados a las urnas en el país y en representaciones en el exterior, donde pueden ejercer su derecho más de 410.000 electores, para elegir entre dos candidatos presidenciales: el correísta Andrés Arauz y el conservador Guillermo Lasso.
Se trata de una elección crucial que se ha visto marcada por las restricciones impuestas por la covid-19 y los llamamientos al voto nulo por parte del movimiento indigenista Pachakutik.