Buenos Aires, 24 mar (EFE).- El Gobierno de Argentina anunció este miércoles su retirada del Grupo de Lima, creado en agosto de 2017 para tratar la situación de Venezuela y formado por una docena de países de América, ya que considera que sus acciones «no han conducido a nada», según un comunicado de Cancillería.
«La República Argentina formalizó su retiro del denominado Grupo de Lima, al considerar que las acciones que ha venido impulsando el Grupo en el plano internacional, buscando aislar al Gobierno de Venezuela y a sus representantes, no han conducido a nada», destaca el texto.
En el mismo se pide «un diálogo inclusivo» para solucionar la crisis venezolana, «que no favorezca a ningún sector en particular, pero sí a lograr elecciones aceptadas por la mayoría con control internacional».
Consideran que de este diálogo debe formar parte «la oposición en su conjunto», junto a «voces provenientes de los principales actores sociales del país, como la Iglesia, el sector empresario y las organizaciones no gubernamentales, sin exclusiones».
«En un contexto en el que la pandemia ha hecho estragos en la región, las sanciones y bloqueos impuestos a Venezuela y a sus autoridades, así como los intentos de desestabilización ocurridos en 2020, no han hecho más que agravar la situación de su población y, en particular, la de sus sectores más vulnerables», agrega el comunicado.
El Gobierno argentino también critica «la participación de un sector de la oposición venezolana como un integrante más del Grupo de Lima», lo que ha provocado que se adopten posiciones que este «no ha podido ni puede acompañar».
Argentina sigue participando en el Grupo Internacional de Contacto (GIC) -integrado por países latinoamericanos y europeos-, y en su última reunión del pasado 2 de febrero, el canciller argentino, Felipe Solá, reiteró que «la solución para Venezuela es de los venezolanos».
DIFERENTES POSTURAS
Argentina formó parte del Grupo de Lima a iniciativa del anterior Gobierno de Mauricio Macri (2015-2019), y tras la asunción del Ejecutivo presidido por Alberto Fernández la posición argentina sobre la situación de Venezuela ha tomado un rumbo diferente.
Argentina decidió no suscribir a una declaración emitida el pasado 13 de octubre por el Grupo de Lima en la que se expresaba el respaldo al líder opositor venezolano Juan Guaidó, reconocido como mandatario interino de Venezuela por varios países.
En ese momento la Cancillería argentina argumentó que el respaldo a Guaidó suponía el «apoyo a un supuesto mandatario al que la Argentina no reconoce y quien nunca tuvo el ejercicio efectivo del Gobierno de la República Bolivariana de Venezuela».
A comienzos de 2020 el país puso fin a la «misión especial» de Elisa Trotta, diplomática enviada por el líder opositor Guaidó, y que el Ejecutivo de Mauricio Macri reconocía como principal representante del país caribeño en Argentina.
Trotta criticó hoy la decisión de abandonar el Grupo.
«Lamentamos la decisión del Gobierno argentino de abandonar el Grupo de Lima, que desde el 2017 ha sido fundamental para denunciar las graves violaciones a los DD.HH. en Venezuela, y para trabajar en la única solución real, que es recuperar la democracia en nuestro país», publicó en su perfil de Twitter.
CRÍTICAS DE LA OPOSICIÓN
Uno de los primeros en expresarse tras conocerse la noticia fue el excanciller Jorge Faurie, quien ejerció el cargo durante el mandato de Mauricio Macri (2015-2019) y fue uno de los principales defensores de la labor del Grupo.
«Grave error política exterior abandonar Grupo Lima. Su objetivo fue y es ayudar que Venezuela recupere su democracia. Argentina no puede estar del lado de la dictadura de Maduro. Libertad y democracia para los venezolanos», publicó Faurie en su perfil de Twitter.
En modo similar se manifestó el diputado nacional Mario Negri, presidente en la Cámara de Diputados del bloque de la Unión Cívica Radical y del Interbloque Juntos por el Cambio.
«En el día más significativo para la lucha por los DDHH en Argentina, el Gobierno tiene el mal tino de anunciar que se retira del Grupo Lima que condena internacionalmente la violación de DDHH en Venezuela. Un despropósito mayúsculo», publicó Negri en relación al Día Nacional de la Memoria por la Verdad y la Justicia, por el que hoy se conmemora el 45 aniversario del golpe de Estado que dio paso a la última dictadura militar del país (1976-1983).