Más de 400 trabajadores de la planta Alimentes Kellogg, S.A quedaron desempleados este martes 15 de mayo, se enteraron a través de un papel pegado en el portón principal de la empresa
Cuando el primer turno llego a la planta a primeras horas de la mañana se encontraron con las puertas de la transnacional Alimentos Kelloggs, S.A ubicada en la zona industrial de San Jacinto, cerradas, con una cadena, candado y un comunicado pegado en el portón en el que se puede leer el cese de las operaciones.
En el comunicado informan a los trabajadores que en sus respectivas cuentas nóminas están depositados todos los pagos correspondientes a: salario, beneficios y prestaciones sociales en virtud de la terminación de la relación laboral, todo de conformidad con la ley del trabajo. Más abajo en el texto hay dos números de teléfono para que los trabajadores puedan comunicarse y obtener mayor información sobre su liquidación.
Mientras tanto los trabajadores se apostaron en las afueras de la empresa a la espera de que saliera algún representante de la directiva a conversar con ellos y darle explicaciones.
Ninguno de los presentes quiso hablar con los periodistas, sin embargo, al revisar los montos depositados comenzaron a manifestar su inconformidad “nos han debido de cancelar todo al dólar paralelo”, dijo uno de los trabajadores, mientras conversaba con una funcionaria de la Inspectoría del Trabajo que acababa de llegar.
Al lugar se apersonó el Ministro del Trabajo, Néstor Ovalles, un fiscal del Ministerio Público y junto a dos representantes de los trabajadores ingresaron a la planta para reunirse con los representantes de la transnacional. Trascendió que los directivos ya no están en el país.
El Pitazo