Dicen que entre bomberos no se pisan las mangueras, ¿pero de qué lado están las autoridades? del pueblo que lo eligió confiando en que resolverían sus problemas; o de una institución que incluso les perjudica su gestión municipal, tal como lo hace la empresa Corpoelec. Para muestra de lo anterior, es que en muchas comunidades donde llega el agua por sistema de bombeo no sirve el servicio de agua potable como debería, porque los constantes bajones, apagones y fallas de energía eléctrica impiden que las bombas de agua arranquen.
Esto ocurre en todos los sectores y municipios, incluso donde siempre ha existido un buen servicio de agua potable, para qué hablar de aquellas zonas donde el servicio siempre ha sido pésimo. En este sentido, es pertinente preguntar ¿qué están haciendo los alcaldes, cómo se están defendiendo ante esta situación? porque esta crisis de energía eléctrica afecta ahora de manera considerable el servicio de agua potable, y ya la gente no sabe qué hacer, a quien acudir ante las fallas. Ahora ya no es porque no sirve la bomba o el motor del sistema de agua potable, sino porque no arrancan. Es hora de que los alcaldes actúen y defiendan a su pueblo, y busquen una respuesta de la empresa responsable.
Destacar además, que algunas zonas tiene suerte porque las bombas o motores no se han quemado, y aún funcionan a media máquina, pero hay otros, donde no han aguantado las constantes fallas y se quemaron, ahora quién responde, el pueblo, los habitantes de cada sector que deben pagar para poder comprar los motores, ante la irresponsabilidad de Corpoelec. Ya basta de tanta negligencia, silencio y complicidad. (Diana Paredes/DLA)