En el despacho del alcalde de Mérida, Alcides Monsalve; el joven Eduardo Parra vio cumplido su deseo de cumpleaños al compartir esta fecha con el mandatario local y su tren ejecutivo, apagar la velita y pedir el deseo del año que comienza. Eduardo es un joven diagnosticado con Síndrome de Asperger.
Y es que el cumpleaños número 18 de Eduardo es especial y merecía la deferencia que tuvo el Alcalde. Un gesto que llenó de humanidad, alegría, inocencia, honestidad y transparencia el despacho municipal y a quienes tuvimos la oportunidad de compartir tan especial momento.
No es propio redactar una nota de prensa en primera persona pero resulta inevitable cuando se ha vivido un instante como este, poner a un lado lo impersonal del trabajo periodístico y agradecer la forma en que Dios habla para sensibilizar al ser humano sobre un tema como la política.
Eduardo tiene un especial interés en la política y es capaz de recordar con perfecta claridad los representantes de numerosos cargos de representación popular del entorno merideño y del resto del país.
Con una franqueza extrema habla de lo que considera cualidades de algunos políticos y errores de otros.
“Gracias Alcalde porque usted si atiende, porque usted escucha y se ríe conmigo. Nunca los olvidaré”, dijo después de apagar su velita de cumpleaños tras una larga y concienzuda reflexión sobre su deseo.
El alcalde Alcides Monsalve tuvo una larga interacción con el joven Aspie, como se denominan también, de quien además recibió sabios consejos. Nuestro eterno agradecimiento a su madre, Elizabeth de Parra por habernos permitido ser parte de este día tan especial para su hijo. (Prensa Alcaldía de Mérida)