Luzfrandy Contreras/DLA.- Durante el mes de noviembre, 23 inhumaciones por COVID-19 se han realizado en el cementerio municipal de San Cristóbal causando alarma en la administración de este campo santo por el poco espacio disponible en la sepultura de estos cadáveres.
René Pérez, administrador del cementerio municipal de San Cristóbal, argumentó que en los meses de septiembre y octubre solo se realizaron 10 inhumaciones en cada mes, lo que indica un aumento del 100%.
Explicó que el espacio disponible en este cementerio municipal es reducido, para lo que se vislumbra en esta temporada. «El espacio es muy poco para lo que queda allí para inhumaciones por COVID-19, la nueva gestión tendría que trabajar en la búsqueda de un nuevo espacio, porque en la manera en que vamos y la manera en como se observan los casos registrados en la ciudad esto va en aumento«, explicó Pérez.
Mientras tanto la preocupación reina en la ciudad de San Cristóbal, donde el alcalde capitalino ha pedido mayor control sobre todo en espacios públicos y de aglomeración como en centros nocturnos e instituciones educativas.
Hace dos semanas, tres de las ocho escuelas municipales tuvieron que paralizar sus actividades motivado al contagio de algunos docentes y alumnos, para la fecha solo tres docentes se mantienen en observación médica. Las clases ya fueron restablecidas en su totalidad, según explicó Rossmary Escalona directora de educación municipal.
«Tengo conocimiento de al menos dos docentes que tienen COVID-19 y por supuesto están en su respectiva cuarentena, con respecto a los niños ellos se incorporaron el lunes y se ha tratado de solventar la situación», explicó Escalona.
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