El diputado de la Asamblea Nacional, Eduardo Marín, se reunió este viernes con la presidenta de la Comisión de Política y Derechos Humanos del Concejo Municipal de San Cristóbal, Yosmar González, para discutir la problemática humanitaria que se ha suscitado tras el éxodo de venezolanos, en especial hacia otros países de Latinoamérica, y elaborar un informe que se elevará a otras instancias nacionales e internacionales.
Marín aseguró que en toda Venezuela y muy especialmente en la ciudad de San Cristóbal, nos encontramos a las puertas de un paro forzoso, producto de la deserción laboral por la severa crisis socioeconómica y la consecuente migración masiva hacia diversos países del continente americano y Europa, situación que han venido monitoreando para levantar el respectivo informe.
Alarmante deserción laboral
El parlamentario de la Asamblea Nacional aseguró que la deserción laboral alcanza el 50 por ciento en la empresa privada; sin embargo, considera prácticamente en alarma al sector público, donde la deserción alcanza el 65%, pues en esta área se manejan tablas salariales cerradas, por lo que no tienen el margen de maniobrabilidad de las empresas para ofrecer sueldos más atractivos que le permitan a los trabajadores quedarse en sus puestos de trabajo.
Los empleados han tenido que abandonar sus labores, aun cuando los cargos son fijos dentro de la administración pública o incluso de libre nombramiento y remoción, porque se van a Chile, Bolivia, Ecuador y Perú, que son los principales destinos de los venezolanos actualmente, aseguró Marín, quien aseveró igualmente que la deserción estudiantil a nivel universitario ya alcanza un 70 por ciento, debido a la emigración masiva.
Dolarización de la economía fronteriza
El diputado nacional reafirmó que la pérdida del poder adquisitivo es la causa directa tanto de la deserción como del éxodo, y que en los últimos meses se ha visto agravado por factores como la escasez de efectivo y la “dolarización” de la economía fronteriza, pues los bienes y servicios se están tranzando no solo en dólares, sino en pesos y hasta euros.
Todos los municipios de frontera y San Cristóbal están padeciendo una dolarización de facto de los bienes y servicios, producto de la hiperinflación, que hace que los comerciantes busquen proteger el retorno de la inversión, aceptando pesos o cualquier otra moneda extranjera, que después puedan cambiar. Eso está afectando y pulverizando completamente el salario de las personas, aseguró.
Marín dijo que adicionalmente a las severas fallas en el transporte público en San Cristóbal, se adiciona que el pasaje urbano solo se cancela en efectivo, y ante la escasez de papel moneda, el usuario por lo general debe repagarlo al doble de su valor, por lo que los costos de los pasajes igualmente se duplican.
No es solamente el problema de conseguir qué comer todos los días lo que tiene ahora al ciudadano ocupado, ahora también es el tema de conseguir efectivo todos los días para pagar el pasaje para venir a trabajar y que el dinero no le alcance para absolutamente nada; por eso estamos próximos a sufrir en el estado Táchira, y posiblemente en el resto del país, un paro forzado de la economía, porque las empresas se quedarán sin empleados—, destacó.
Crisis humanitaria por falta de pasaportes
Aseveró que como a la gente, lo que ganan ya no les está alcanzando ni para pagar pasajes ni para comer y prefieren sencillamente llenar una maleta de ropa e irse del país, pero que quienes tratan de huir de Venezuela se consiguen con un obstáculo adicional y es el hecho de que actualmente es casi imposible conseguir pasaporte, porque lo que actualmente se está generando una crisis humanitaria al otro lado de la frontera, especialmente en la ciudad de Cúcuta, por la presencia masiva de venezolanos en condición de ilegales, lo que le dificulta el acceso a un empleo formal.
Conseguir pasaporte es algo prácticamente imposible en Venezuela, entonces terminan convirtiéndose en refugiados en la ciudad de Cúcuta u otras ciudades de frontera con Colombia, lo que ha generado una situación grave de derechos humanos. Y alertamos hoy al país, de que esto se va a incrementar de manera exponencial, en la misma medida en la que el desastre económico que se consumió a la revolución bolivariana, siga avanzando—, afirmó.
En este sentido, Marín señaló que hoy más que nunca que al país se le dé una fecha “de elecciones transparentes, claras, con condiciones que reconozca la comunidad internacional, para que así se abra una ventana de esperanza de poder lograr un cambio, porque la salida de Nicolás Maduro del poder es la única forma de que este desastre se detenga”.
NP