Luis Huz Ojeda
Cronista del Municipio San Rafael de Carvajal
Abraham Peña Quevedo un Carvajalense nacido en el Hospital Central de Valera, centro dispensador de salud hasta donde su progenitor Abrahán Peña (Padre) traslado desde la casa materna situada en Campo Alegre, a su Madre Magdalena Quevedo, para que diera a luz el día 15 de junio de 1968.
La totalidad de su Educación Primaria la curso en el Grupo Escolar “Rafael Quevedo Urbina” ente educativo situado en la localidad antes señalada, Educación Básica en el Liceo “Monseñor Estanislao Carrillo” de Carvajal y Diversificado en el Liceo Nocturno Rafael Rangel en Valera.
Por aliento, apoyo y solidaridad del Presbítero Alexis Bastidas en ese entonces párroco del Templo “Sagrado Corazón de Jesús” de Campo Alegre se inscribe en la Escuela de Música “Laudelino Mejías” de la ciudad de Valera, donde sin culminar estudios alcanza conocimientos sobre Teoría y Solfeo.
Solo música
Antes de iniciar conversación Abrahán Peña interrumpe su habitual estudio con la Guitarra, mira hacia el horizonte, como tratando de devolver el tiempo y con un dejo de nostalgia recuerda.
“Mi identificación con la música desciende de la vena paterna, mi Nono, Benito Peña dedico toda su vida trabajar la agricultura, sus pocos ratos de ocio los dedicaba para afinar y pulir detalles sonoros, era un virtuoso ejecutante del Cuatro que aprendió viendo tocar a mi bisabuelo y a otros músicos que tocaban con él, esto le permitió desarrollar habilidad y destreza al momento de tocar y sensibilizar su oído y memoria melódica. En su época no hubo rezos cantados en los velorios de angelitos, buscas y paraduras de niño, fiestas de la cruz de mayo, serenatas y parrandas locales donde no hiciera presencia mi abuelo. Al comienzo de mi aprendizaje en el manejo de las cuerdas del Cuatro di los primeros pasos con él, quien a través de la práctica primeramente me enseño La Ritmia y Los Tonos de la cuerdas del Cuatro, e igualmente me revelo la existencia de manuales y métodos para mejorar la ejecución de este y otros instrumentos de música de cuerdas entre ellos La Guitarra…
Inicios
Era muy muchacho aun, cuando me integro al coro parroquial de la Iglesia Sagrado Corazón de Jesús aquí en Campo Alegre como ejecutante de la guitarra, ya poseía un montón de ilustraciones como músico de cuerdas, aprendidas de mi abuelo con ganas de instruirme más, este importante paso, me permitió conocer música sacra, aguinaldos, gaitas, interactuar con músicos de otro nivel y diversas tendencias con quienes durante las presentaciones del coro en otras iglesias y encuentros compartí tarima, experiencias y vivencias artísticas, esta hermosa y educativa pasantía contribuyo en el afianzamiento de mi formación y me fortaleció espiritualmente”.
Gaita… gaita…
Logrando la oportunidad se integra al conjunto de gaitas -Los Alegres del Limón- propiedad de Antonio –Morrocoy- Paredes, fundado en el callejón de Pedro Suarez del sector El Limón, todas las noches de lunes a jueves efectuaban sus ensayos en la sede dispuesta a tal fin, un salón del -Club Teléfonos- sede de la distracción y esparcimiento del personal administrativo, técnico y obrero de la Cantv, que quedaba ubicado en El Amparo donde hoy luce imponente el C.C Vista Park. Se revela ante el público gaitomano local como intérprete y músico de este género pascuero al lado de Alberto Quevedo; Edixon Peña; William Peña tamboreros, Freddy Lozada; Ramón -El Dientón- Delgado furreros, Abraham Peña; Alexander Camacho; Raúl Lozada cuatristas, Johnny Díaz charrasca; Orlando Barrios; Orlando -Tun-Tun- Suarez coristas. Con esta agrupación disfrutaron animar infinidad de fiestas, tanto públicas como privadas, constituyéndose en constantes visitantes del Amparo, Campo Alegre, Las Mesetas del Corozal en San Genaro, Las Mesetas de Chimpire entre otros ámbitos territoriales. Esta misma tropa de músicos son quienes después de ciertas temporadas en la palestra musical emigran hasta la agrupación -Son Gaitero- de los Hermanos Valecillos en la calle 8, allí pernotan corto tiempo, posteriormente se unen a la escuadra gaitera -Interac Club- de la mano de Gerardo Blanco, Isidro –Piro- Suarez, Pablo González en El Amparo. Alargando su andar con la Gaita cumple pasantías con –Manglar-, de Baldomero Simancas, -La Nueva Ronda-, -Renacer Gaitero-, -Manduyo- de Valera, -Los Hijos de Carvajal-, -La Clave Gaitera-, -Los Gaiteritos de Carvajal- agrupación infantil que constituye dentro del género Gaitero, lo que en música clásica pudiéramos identificar como Voces Blancas, son lo más granado de la musicalidad infantil interpretativa de la Gaita en el Municipio San Rafael de Carvajal. Abrigados y guiados por Moreira Negrón, Carvajalense asimilada de alma y corazón, comunidad o familia sonora de la que formo parte desde sus inicios y tuvo la responsabilidad de estrenar Gaitas compuestas por Jorge Juárez, Mario Estelio Valero entre otros siendo su director musical. “Los Gaiteritos- son nuestros embajadores culturales en toda la geografía nacional y constituyen el relevo generacional gaitero de nuestro bendecido suelo, su estilo e interpretaciones son harto conocidas, habiendo alcanzado tantos niveles de popularidad que desde su aparición cada temporada es corta para cumplir con todas las solicitudes para hacer presencia física en distintos escenarios regionales y nacionales, la calidad de esta joven agrupación ha sido reconocida en variados espacios, llegando a obtener la distinción de múltiples premios…”.
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Despunte artístico
En simultáneo a su estancia en el coro parroquial, se une a los jóvenes y talentosos músicos carvajalenses: Antonio Contreras al Piano; Alexander Camacho tocando Batería; Raúl Lozada el Bajo; Abrahán Peña en la Guitarra y vocalización para constituir la agrupación musical –Oasis- e irrumpen en escena interpretando baladas de ayer y hoy, al momento ese era el género musical de moda, alcanzando mostrar su talento, entre otros escenarios de sana distracción social y clubes de las ciudades de Trujillo y Valera a los asiduos visitantes de la Fuente de Soda –Vam-, Cervecería -Green Garden-.
Anécdotas
Abraham Peña señala. “En el transcurrir del año de 1994 en los distintos medios de comunicación de la región se promociono con tanta insistencia un casting para captar talentos musicales en los espacios de la Discoteca -The Secret- en Valera, me motive a ser partícipe de esta audición que contaría entre sus evaluadores a La Malandra Isabel y otros conocedores de música, me prepare como Dios manda e intervine en la velada con la pieza “Un Gato en la oscuridad” autoría del cantautor brasilero Roberto Carlos y para mi sorpresa alcance clasificar, ganándome el derecho a participar en el programa televisivo “Cuanto Vale el Show” que semanalmente desde la capital de la Republica se trasmitía por los canales de RCTV, brindándome la oportunidad de revelar a todos los amantes de la música mis condiciones artísticas como vocalista y el privilegio de compartir con renombrados artistas de la gran Caracas y otras regiones del país, fue una experiencia única e inolvidable… Mereciendo en esa misma ocasión subir al escenario de un conocido centro social capitalino junto a Mary Cruz Quintero, Frank Quintero y Carlos Mata. Igualmente pasado un tiempo también alcance a mostrarme por Venevision en el programa musical “Buscando una Estrella” donde alcance interpretar exitosamente cinco composiciones de Ricardo Arjona, esos momentos quedaron grabados en la memoria”.
Nada es fácil
Abraham Peña prosigue. “Mis inicios fueron de tiempos difíciles para la incursión en el arte y mundo de la música, muchas veces cuando uno pasaba con algún apero musical la gente lo miraba a uno con recelo. Me acuerdo de esa época un día de Las Madres que fueron cuando voluntariamente tome la iniciativa de presentarme al público presente en el desaparecido Centro Social “El Bohío” propiedad de Pepe Rangel, apoyándome en un viejo radio grabador doméstico, de los que antes se utilizaban para reproducir la sonoridad de las cintas magnetofónicas, llegue al local instale el equipo lo probé instalando en su cassetera una cinta contentiva de unas pistas sonoras de algunas baladas de moda, dejando todo listo me presento al público, de inmediato pulso el botón demandado para qué esta comenzara a sonar, la cinta se enmarañó y sin música me vi obligado a suspender mi actuación por espacio de hora y media, tiempo que demando la reparación del radio grabador y la cinta, ya subsanado el percance, volví por mis fueros y alcance cantar la balada –Prométeme- la única canción que en ese tiempo me sabía de memoria, cuando esto ocurrió los clientes presentes habían perdido el interés por mi desempeño, pero esa fue mi primera presentación pública como solista y siempre la recuerdo”. En lo actual forma parte del staff de músicos del conjunto -Bubinga-, también atiende compromisos sociales free lance, ejerce como docente de la Fundación Orquesta Nacional Juvenil Simón Bolívar, núcleo Valera e imparte sus sapiencias de canto y cuatro a particulares.