Eduardo Viloria / DLA
El abogado Rafael Domínguez, señalado como presunto involucrado en la decisión tomada en Sabana de Mendoza, que llevó a la determinación de las autoridades respectivas a demoler el Kiosco El Pregonero, ubicado en la avenida principal de la capital del municipio Sucre, envió a DLA una declaración donde antepone y señala tácitamente, que la decisión de demoler el señalado Kiosco, haya sido influenciada por su condición de Juez, por no serlo. Soy abogado, en libre ejercicio, actuando en nombre de un ciudadano afectado en su derecho de propiedad, dijo Domínguez, todo esto añade, tras las recientes declaraciones emitidas por la comerciante del municipio Sucre, Benita Veramí Tello
Construcción realizada a hurtadillas
Expresó el declarante que dicho Kiosco fue construido a “hurtadillas” y sin permiso alguno, obstruyendo parte de la entrada de un inmueble de mi representado, añadiendo además que dicho estructura estaba en áreas verdes comunitarias de la Avenida Bolívar de Sabana de Mendoza.
Se ha actuado de mala fe
Expresó además el abogado, que la señora Veramí Tello, como es conocida, “actuó de mala fe y ultranza, con pretensiones engañosas hacia la colectividad en general, puesto que hicieron uso de todos sus derechos constitucionales a la defensa, además, que se apersonaron ante la Alcaldía del municipio Sucre, así como en el Tribunal Estatal Contencioso Administrativo de la Circunscripción Judicial del estado Trujillo, sin embargo, sus demandas no les prosperaron. Incluso, intentaron un recurso de amparo Constitucional, el cual les fue declarado inadmisible, porque no les asiste la razón”.
Añadió el abogado Domínguez que “es falso que dicho kiosco haya sido declarado patrimonio histórico y cultural de la localidad, ya que se trata de una pequeña estructura edificada ilegalmente sobre áreas verdes comunitarias, cosa que está prohibida por ley”.
Precisó el declarante que el procedimiento ejecutado se realizó dentro del marco de la Ley y nunca de manera arbitraria, teniendo una data de más de cuatro años, tiempo durante el cual la supuesta afectada se ausentó del país, por lo que dejó empoderados en Venezuela para su representación y defensa.
Dijo al final el abogado Domínguez; “que rechazaba categóricamente todos los señalamientos injuriosos y difamatorios, endilgados en mi contra, sin fundamento alguno. En tal sentido me reservo el derecho del ejercicio de las acciones penales a que hubiere lugar. Somos respetuosos del derecho ajeno, pero también exigimos el reconocimiento de nuestros derechos”.
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